¡28 años después, Charles Spencer rinde emotivo homenaje a la princesa Diana con flores y símbolos en Althorp!

28 años después de su muerte, Diana de Gales sigue siendo recordada con solemnidad

Este domingo se conmemoraron 28 años de la trágica muerte de la princesa Diana, una figura que permanece vigente en la memoria colectiva. Aunque el tiempo ha pasado, su legado y la huella que dejó en millones de personas en todo el mundo continúan intactos.

Un homenaje íntimo desde Althorp

Este día, su hermano menor, Charles Spencer, rindió un emotivo tributo a la “princesa del pueblo” en la residencia familiar de Althorp, ubicada en Northamptonshire, Inglaterra. En un acto cargado de simbolismo, el conde Spencer compartió en su perfil de Instagram dos fotografías que reflejan tanto su belleza como la tristeza que aún persiste en su memoria.

En una de ellas, se observa un ramo de rosas blancas y rosadas, recogidas ese mismo día en los jardines de Althorp, preparado para ser depositado en la tumba de Diana. La imagen viene acompañada por un mensaje sincero: “Flores que cortamos esta mañana de los jardines de Althorp para la isla”, y añade con sencillez: “Siempre un día imposible”.

La segunda fotografía muestra la isla privada en el lago Oval, donde descansan los restos de la princesa. Este lugar, elegido por su hermano, combina privacidad, serenidad y belleza natural, siendo un espacio donde la familia puede honrar su memoria lejos de la atención pública.

El legado y el lugar de descanso de Diana

La muerte de Diana ocurrió en París, en un accidente automovilístico ocurrido el 31 de agosto de 1997, junto a su pareja, Dodi Fayed, y el conductor Henri Paul. La noticia conmocionó al mundo entero y dejó huérfanos a sus dos hijos, los príncipes William y Harry, quienes en ese momento tenían 15 y 12 años respectivamente.

Desde entonces, cada aniversario se convierte en un momento de duelo y reflexión, tanto para su familia como para los millones de admiradores que mantienen vivo su recuerdo. La decisión de ubicar su tumba en la isla de Althorp fue tomada por Charles Spencer, quien consideró que su belleza y tranquilidad eran ideales para honrar su memoria. En su libro Althorp: The Story of an English House, expresó que “todos estuvieron de acuerdo en que, con su belleza y serenidad, ese era el lugar para Diana”.

En varias entrevistas, Spencer también explicó que esta elección buscaba proteger a sus hijos y ofrecerles un espacio privado para recordar a su madre. “Creo que es muy importante que puedan estar aquí con ella. Afortunadamente, este es un lugar muy tranquilo, donde pueden venir cuando quieran sin interrupciones. Para mí, eso es un gran consuelo”, declaró.

Un lugar de peregrinación y homenaje

El mausoleo de Diana permanece cerrado al público, pero en los terrenos de Althorp se erige un monumento en su honor, inaugurado en julio de 1998. Rodeado de un entorno natural que invita a la reflexión, este memorial se ha convertido en un punto de peregrinación para quienes desean rendir tributo a su memoria.

Su influencia trasciende generaciones, y cada año, miles de admiradores visitan el lugar para honrar su legado y recordar su figura como una de las mujeres más influyentes del siglo XX. La historia de Diana continúa siendo un símbolo de compasión, empatía y lucha por causas sociales, que aún resuena en el mundo actual.