Alcalde de Lima anuncia instalación de cañón en su despacho como protesta por el trato del gobierno de Dina Boluarte

Alcalde de Lima anuncia instalación de cañón en su despacho como protesta contra el Gobierno

El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, sorprendió al anunciar que colocará un cañón en su despacho, dirigido hacia el Palacio de Gobierno, en señal de protesta por el trato recibido por parte del Ejecutivo de Dina Boluarte. La medida busca visibilizar lo que López Aliaga califica como un “descuido absoluto” y un “pésimo trato” hacia la capital peruana, en medio de una serie de tensiones políticas y administrativas. Según explicó el alcalde en un evento donde entregaba 36 camionetas, el cañón será traído del Parque de la Muralla y colocado en su oficina, evocando gestos similares realizados en el pasado por otros líderes políticos.

## Un símbolo de protesta con historia

Este tipo de acciones no son nuevas en la historia política limeña. En ocasiones anteriores, la colocación de armamento en espacios públicos ha sido utilizada como símbolo de rechazo hacia el Gobierno. Un ejemplo destacado fue durante la remodelación de la Plaza de Armas, cuando se rescató un cañón de las guerras por la independencia y se ubicó en el balcón del Palacio Municipal, que entonces era gobernado por Alberto Andrade y apuntaba hacia el Palacio de Gobierno, en aquel momento gobernado por el expresidente Alberto Fujimori. La imagen de estos cañones, en su momento, simbolizaba resistencia y descontento político.

López Aliaga no solo ha recurrido a símbolos militares para expresar su malestar, sino que también ha hecho duras críticas al modelo de gestión del gobierno central. En recientes declaraciones, acusó a Dina Boluarte de repartir cargos estratégicos en función de pactos políticos, con especial énfasis en partidos como Fuerza Popular, liderada por Keiko Fujimori, y Alianza para el Progreso, de César Acuña. El alcalde afirmó que el gobierno no muestra voluntad política y que, en cambio, se dedica a distribuir recursos a partidos para mantener su poder, sin realizar recortes en personal ni en consultorías.

También criticó duramente al actual titular del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, César Sandoval, a quien calificó como un “operador político” con aspiraciones electorales en La Libertad. López Aliaga sostuvo que Sandoval busca ser candidato al gobierno regional y que, en su opinión, su permanencia en el cargo obstaculiza el avance de proyectos en Lima, como el tren de cercanías.

## Tensión política en aumento

Estas expresiones y gestos reflejan la creciente tensión entre el municipio limeño y el gobierno central. López Aliaga ha advertido que, si Sandoval continúa en su puesto con intenciones políticas, se enfrentará a una confrontación abierta. La situación revela las fracturas existentes en la política peruana, donde las disputas de poder y las diferencias ideológicas parecen intensificarse en medio de un clima de incertidumbre y protestas sociales.

La instalación del cañón en el despacho del alcalde es, en definitiva, un símbolo fuerte de descontento y una forma de llamar la atención sobre lo que considera una falta de respeto y apoyo hacia la gestión municipal y la ciudad de Lima.