Mujer que mató a su novio en 2018 enfrenta violencia en su matrimonio

Una mujer argentina, que en 2018 fue condenada por atropellar y matar a su pareja en Mendoza, fue detenida el pasado jueves 24 de julio por una nueva denuncia de agresión. La acusación señala que la mujer golpeó a su actual esposo, con quien contrajo matrimonio en 2022 y con quien tiene una hija de un año. Este incidente ha generado gran atención en los medios locales, ya que también existen denuncias mutuas entre ambos.

El hecho ocurrió cuando el esposo llamó a la policía desde el baño de su vivienda, ubicada en Mendoza, para denunciar que había sido agredido físicamente por su esposa. Cuando los agentes llegaron al domicilio, constataron que el hombre mostraba lesiones visibles en su cuerpo. Como resultado, Julieta Silva fue arrestada por lesiones leves agravadas por el vínculo. La justicia dictó medidas cautelares, ordenando su prisión domiciliaria, supervisada con una tobillera electrónica, además de prohibirle acercarse a su pareja mientras se desarrolla la investigación.

Por otro lado, Silva también presentó una denuncia en la Unidad Fiscal de Género, que forma parte de la causa en trámite. La mujer, además, mantiene un historial judicial por delitos previos relacionados con su expareja. En 2018, fue condenada a tres años y nueve meses de prisión por homicidio culposo agravado tras atropellar y matar a Genaro Fortunato, en un incidente ocurrido en San Rafael en 2017. La sentencia concluyó que, tras una discusión con la víctima, la mujer lo arrolló en la calle, aunque su defensa argumentó que no lo vio debido a las condiciones de oscuridad y lluvia. Sin embargo, el tribunal consideró que hubo negligencia, descartando intenciones homicidas.

Este caso ha reavivado el debate sobre la violencia de género y la protección a las víctimas, especialmente en situaciones donde las denuncias mutuas y antecedentes judiciales están presentes. La investigación continúa en curso, mientras la comunidad espera que se esclarezcan todos los hechos y se garantice la seguridad de las personas involucradas.