¡Escándalo en concierto de Coldplay! CEO y amante descubiertos en plena pantalla; él ya estaba separado ¡Y ahora la verdad sale a la luz!

El incidente en el concierto y su repercusión pública

El pasado 9 de septiembre de 2025, una escena protagonizada por el CEO de la empresa Astronomer, Andy Byron, generó gran controversia a nivel mundial. Durante un concierto de Coldplay en Estados Unidos, ambos fueron captados en pantalla grande en un momento que rápidamente llamó la atención de los asistentes y del público en redes sociales. La imagen de Byron junto a su amante provocó un inmediato revuelo, ya que, al ser enfocados por las cámaras, ambos se separaron abruptamente, alimentando las sospechas sobre una posible infidelidad.

Este evento no pasó desapercibido y se convirtió en tendencia, generando múltiples memes y comentarios en las plataformas digitales. La atención se centró en la figura del empresario, quien por entonces era el director ejecutivo de Astronomer. La situación escaló rápidamente y llevó a la salida de Byron de la compañía, así como a la renuncia de su colega y pareja, Kristin Cabot.

Revelaciones y cambios en la historia personal

Dos meses después del incidente, nuevas informaciones han salido a la luz, alterando la narrativa inicial. En medio de los trámites de divorcio, Andrew Byron admitió que él y Kristin Cabot estaban separados desde varias semanas antes del concierto de Coldplay. De acuerdo con información publicada por People, un portavoz de Byron confirmó que la pareja tomó caminos separados de manera privada y amistosa antes del evento.

El anuncio del divorcio ha sido interpretado como un intento de poner fin a las especulaciones sobre la infidelidad de Kristin, quien también era su colega en la misma empresa. La pareja, que no tuvo hijos, buscaba resolver su separación en términos respetuosos, priorizando la privacidad y el bienestar familiar.

Contexto y antecedentes adicionales

Andrew Byron, de 61 años, es conocido por su rol como director ejecutivo de Privateer Rum. La noticia de su separación y la controversia en el concierto no solo afectaron su imagen pública, sino que también marcaron un punto de inflexión en su vida personal y profesional. La situación evidencia cómo un evento privado puede transformarse en una noticia de alcance internacional, afectando incluso la reputación de figuras empresariales de alto perfil.

Hasta ahora, Byron ha pedido respeto y privacidad para su familia, dejando claro que la separación fue una decisión mutua y previa al incidente en el concierto. La historia continúa desarrollándose, y se esperan nuevos detalles en los próximos días.