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Terremoto mortal en Afganistán deja miles de muertos y miles de desplazados en condiciones extremas pese a una semana de devastación

Escrito por radioondapopular
septiembre 11, 2025
Terremoto mortal en Afganistán deja miles de muertos y miles de desplazados en condiciones extremas pese a una semana de devastación





La devastación en Afganistán tras el terremoto: una crisis humanitaria en curso

Situación de emergencia en Afganistán tras el terremoto de agosto

Más de una semana después del terremoto que azotó el este de Afganistán, miles de familias continúan viviendo en condiciones precarias. La mayoría duerme sobre el suelo desnudo, soportando temperaturas que alcanzan los 40 grados Celsius. Sin acceso a agua potable, servicios higiénicos adecuados o refugios estables, estas comunidades permanecen vulnerables. Muchas familias han improvisado tiendas de campaña o simplemente permanecen a la intemperie, enfrentando día tras día la incertidumbre y el frío inminente del invierno afgano.

El impacto del sismo y las cifras oficiales

El sismo de magnitud 6.0, ocurrido en la madrugada del 31 de agosto, dejó un rastro de destrucción en varias provincias montañosas del país. Las autoridades locales estiman que el desastre ha causado la muerte de al menos 2.200 personas y ha dejado más de 3.000 heridas. Sin embargo, estas cifras podrían ser mayores, ya que muchas aldeas remotas permanecen inaccesibles y sin evaluación oficial. La ONU calcula que más de 500.000 residentes en provincias como Kunar, Laghman y Nangarhar han sido afectados por el terremoto.

Respuesta humanitaria y dificultades de acceso

Organizaciones internacionales, como Médicos Sin Fronteras (MSF), han desplegado equipos de emergencia en las zonas afectadas. Desde Jalalabad, la ciudad más cercana al epicentro, el responsable de comunicación de MSF, Alexandre Marcou, describe la situación como «extremadamente complicada». La organización ya ha inaugurado su primera clínica móvil en el campo de desplazados de Patang, donde han sido reubicadas unas 1.000 familias. La precariedad de las construcciones locales, hechas mayormente de adobe y piedra, ha agravado los daños. «El terremoto no fue muy fuerte, pero al ser superficial, las estructuras débiles colapsaron con facilidad», explica Marcou.

Desafíos en los esfuerzos de rescate y evaluación

La difícil geografía montañosa y los caminos destruidos dificultan los esfuerzos de rescate y evaluación en las zonas más afectadas. Solo existen dos vías de acceso principales hacia las áreas dañadas en Kunar, lo que limita la llegada de ayuda y personal de emergencia. La ONU ha logrado acceder a menos del 15% de las aldeas afectadas, dejando muchas comunidades en la sombra y sin información clara sobre la magnitud de los daños. La situación requiere una respuesta rápida antes de que llegue el invierno, que podría complicar aún más la crisis humanitaria.

La vulnerabilidad de las viviendas y el riesgo en las zonas rurales

La destrucción de viviendas revela la fragilidad del entorno rural en Afganistán. Las casas de adobe y piedra suelta colapsaron fácilmente durante las sacudidas, atrapando a familias enteras mientras dormían. La falta de infraestructura resistente y la pobreza crónica hacen que la población sea especialmente vulnerable ante desastres naturales. La comunidad internacional continúa movilizando recursos para atender la emergencia, pero la situación requiere una acción coordinada y sostenida.

En conclusión, Afganistán enfrenta una crisis humanitaria que requiere atención urgente, con comunidades enteras en riesgo y un acceso limitado para las organizaciones de ayuda. La cooperación internacional será clave para salvar vidas y proporcionar un alivio duradero en medio de una situación de vulnerabilidad extrema.


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