Talibanes rechazan reclamación de EE. UU. y Trump insiste en retomar la estratégica base de Bagram

Afganistán rechaza la propuesta de EE.UU. para recuperar la base de Bagram

El gobierno afgano ha rechazado la petición del expresidente Donald Trump de que Estados Unidos retome el control de la base aérea de Bagram. A través de una declaración en redes sociales, un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Kabul afirmó que el país está dispuesto a dialogar, pero dejó en claro que no permitirá que EE.UU. vuelva a establecer una presencia militar en territorio afgano.

La base de Bagram, ubicada al norte de Kabul, fue un punto estratégico durante las dos décadas de ocupación estadounidense en Afganistán. En 2021, los talibanes retomaron el control tras la retirada de las tropas internacionales y el colapso del gobierno afgano. La instalación también albergó una prisión notoria, donde muchos detenidos fueron encarcelados sin cargos ni juicios, y algunos sufrieron abusos o torturas.

Las declaraciones de Trump y las perspectivas sobre la base de Bagram

El pasado jueves, Trump expresó su deseo de recuperar la base de Bagram, argumentando que su posición es clave por su proximidad a China. «Estamos intentando recuperarla», afirmó el expresidente. Agregó que Estados Unidos entregó la base «sin ninguna razón» y resaltó que está a solo una hora de distancia de donde China fabrica misiles nucleares. Sin embargo, esta propuesta ha sido rechazada firmemente por los talibanes.

Un representante del gobierno afgano, Zakir Jalal, subrayó que Afganistán y Estados Unidos deberían mantener un diálogo basado en el respeto mutuo y en intereses compartidos, pero sin presencia militar estadounidense en el país. La postura oficial de Kabul parece estar alineada con la soberanía y la no intervención extranjera en su territorio.

Negociaciones y posibles implicaciones futuras

Por primera vez, Trump confirmó que su administración ha iniciado conversaciones con funcionarios talibanes. La semana pasada, representantes de EE.UU., incluido Adam Boehler y Zalmay Khalilzad, se reunieron con el Ministro de Relaciones Exteriores de los talibanes, Amir Khan Muttaqi, en Kabul. La discusión principal giró en torno a la situación de ciudadanos estadounidenses detenidos en Afganistán.

Desde marzo, fuentes de medios como CNN han informado que Estados Unidos ha considerado reactivar una presencia en Bagram, no solo por motivos de seguridad, sino también para acceder a los recursos minerales del país. No obstante, Washington no reconoce oficialmente al gobierno talibán como legítimo, reafirmando su postura de no tener relaciones diplomáticas plenas con el régimen en Kabul.

La discusión sobre la base de Bagram refleja la complejidad de las relaciones internacionales en la región y el interés de EE.UU. en mantener influencia estratégica en Afganistán, pese a la retirada militar formal hace dos años.