¡Crisis en Reino Unido! Jaguar Land Rover paraliza su producción tras ciberataque y pone en riesgo a 200 mil empleos

Detención total de producción en Jaguar Land Rover ante ciberataque

Desde principios de este mes, Jaguar Land Rover (JLR), fabricante británico de automóviles, ha detenido por completo su producción. La suspensión ha provocado una crisis en el Reino Unido, poniendo en riesgo toda la cadena de suministro del sector automotriz, según informan diversos medios internacionales.

La compañía, que forma parte del grupo indio Tata Motors, cuenta con aproximadamente 33 mil empleados directos. Sin embargo, sus efectos se extienden mucho más allá, afectando a unas 200 mil personas en empleos indirectos relacionados con proveedores, logística y servicios auxiliares. La situación ha generado gran preocupación tanto en el ámbito industrial como político.

¿Qué causó la paralización de Jaguar Land Rover?

El problema se originó a raíz de un ciberataque detectado en medio de su actividad. La BBC informó que la empresa identificó rápidamente la intrusión y tomó medidas inmediatas para limitar el daño, cerrando sus sistemas de tecnología de la información (TI) de manera preventiva.

En ese momento, JLR comunicó que había adoptado acciones para mitigar los efectos del incidente, incluyendo el apagado de sus sistemas y el inicio de un proceso controlado para reiniciar sus operaciones a nivel global. La compañía aseguró que, hasta ahora, no hay pruebas de que datos de clientes hayan sido sustraídos, pero reconoció que sus actividades comerciales y de producción están gravemente afectadas.

Impacto y respuesta política ante el ciberataque

La situación aún no se ha estabilizado, lo que ha generado preocupación en las esferas políticas del Reino Unido. Según Bit Life Media, el pasado 19 de septiembre, funcionarios del Departamento de Negocios y Comercio (DBT) sostuvieron reuniones de emergencia con representantes de la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Automoción y de la Sección de Componentes del sector, para evaluar el alcance del problema y buscar soluciones.

Además, más de 30 parlamentarios británicos enviaron una carta al secretario de Negocios, Peter Kyle, solicitando apoyo para la empresa. Advirtieron que, si la paralización continúa, la cadena de suministro basada en el Reino Unido podría desaparecer. También alertaron sobre la posible pérdida de personal especializado, difícil de reemplazar en el corto plazo.

En los últimos días, se reportó que ya se han producido despidos, al menos en las fábricas auxiliares. Un proveedor anónimo de JLR habría reducido en casi la mitad su plantilla en la semana pasada, reflejando la gravedad de la crisis.

Esta situación pone en evidencia la vulnerabilidad del sector industrial ante amenazas cibernéticas y resalta la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad en empresas clave para la economía del país.

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