¡Christian Brueckner, en libertad, asegura tener pruebas que «terminarán el caso Madeleine McCann»!

Christian Brueckner, en libertad y con supuestas pruebas que podrían resolver el caso

El pasado 17 de septiembre de 2025, Christian Brueckner, considerado el principal sospechoso de la desaparición de Madeleine McCann en 2007, fue puesto en libertad tras cumplir una condena por violación. Poco después de salir de prisión, adquirió un teléfono móvil y una tarjeta SIM, y durante la transacción realizó una declaración que ha generado alarma en las autoridades y la opinión pública.

Según información revelada por The Sun, Brueckner, de 49 años, habría insinuado tener en su poder pruebas que podrían poner fin al misterioso caso que ha conmocionado al mundo durante años. La declaración fue hecha en presencia del vendedor, quien además contó que las cámaras de seguridad del establecimiento confirmaron estos hechos.

Compra de teléfono y una confesión preocupante

Las imágenes muestran cómo Brueckner gastó alrededor de 90 euros en un teléfono Android Xiaomi Redmi y adquirió una tarjeta SIM, identificándose con su documento oficial. El gerente de la tienda, Farouk Salah-Brahmin, de 32 años, relató que el sospechoso le dijo que poseía información que podría resolver el caso McCann, aunque no especificó detalles concretos.

Salah-Brahmin afirmó que Brueckner aseguraba tener pruebas que podrían “poner fin al escándalo del siglo” y que contaba con memorias USB que contenían datos relevantes. El comerciante agregó que el alemán también afirmó que podía limpiar su nombre y acabar con todas las acusaciones en su contra, lo que incrementa la tensión en torno a su declaración.

Brueckner y las amenazas a su vida

El sospechoso, quien en varias ocasiones se negó a colaborar con la policía durante su encierro, sí reveló detalles al vendedor. Según Salah-Brahmin, Brueckner mencionó que su vida corría peligro y que había información sobre algunas personas relacionadas con su pasado, posiblemente vinculadas a redes peligrosas.

El gerente también contó que Brueckner le habría dicho que su vida estaba en riesgo por poseer información “especial” y que las amenazas eran tan graves que incluso temía ser asesinado. El sospechoso llegó a afirmar que “no aguantaría mucho en prisión” y que alguien de su pasado, quizás vinculado a delitos sexuales, quería acabar con él.

Reacciones y preocupación pública

Durante la conversación, Brueckner mostró su tobillera electrónica y bromeó diciendo: “Mira, estoy bajo control”. La declaración generó temor entre quienes estaban presentes, y Salah-Brahmin confesó que fue la primera persona con la que Brueckner habló en profundidad tras su liberación, lo que le causó preocupación.

El caso de Brueckner continúa siendo un enigma, y estas revelaciones aportan una nueva dimensión a la investigación. La policía ha declarado que está analizando las declaraciones y las pruebas que podrían estar relacionadas con el caso McCann, aunque aún no hay confirmaciones oficiales sobre la veracidad de las afirmaciones del sospechoso.

Brueckner fue condenado recientemente por la violación de una mujer de 72 años en la misma zona de Portugal donde la familia McCann solía vacacionar. La investigación sigue abierta, y las autoridades trabajan para esclarecer todos los hechos relacionados con este caso que ha mantenido en vilo a la opinión pública durante más de 15 años.

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