Hugh Jackman revela que interpretar a Wolverine arruinó irremediablemente sus cuerdas vocales

Hugh Jackman y el costo de su dedicación a Wolverine

El compromiso de Hugh Jackman con su papel de Wolverine en la saga de X-Men ha dejado una huella imborrable tanto en la historia del cine como en su propia salud vocal. A lo largo de los años, el actor australiano se entregó por completo al personaje, lo que tuvo un impacto irreversible en sus cuerdas vocales, según informó Sensacine.

Antes de consolidarse como un ícono de los superhéroes en Hollywood, Jackman ya gozaba de reconocimiento en el mundo del teatro musical. Participó en producciones como “La bella y la bestia”, “El crepúsculo de los dioses” y “Oklahoma!”, donde su potente y versátil voz lo convirtió en uno de los principales talentos del escenario. Sin embargo, la exigencia vocal de estos papeles contribuyó a preparar su cuerpo para los desafíos que enfrentaría en su carrera cinematográfica.

Transformación vocal y su impacto en la carrera

Al adoptar el rol de Wolverine, Jackman tomó una decisión audaz: modificar radicalmente su tono de voz. Inspirado en la imagen ruda que los fans asocian con el personaje de Marvel, desarrolló un registro más grave y áspero, que contribuyó a dotar de mayor autenticidad a su interpretación. Los gruñidos y expresiones vocales características del mutante se convirtieron en una firma personal que consolidó su imagen como el rostro indiscutible del héroe.

Este cambio, aunque efectivo para conectar con el público, exigió un esfuerzo vocal intenso. Durante largas jornadas de rodaje y presentaciones, Jackman forzó su voz, sometiendo sus cuerdas vocales a un desgaste progresivo. La consecuencia fue la pérdida de parte de su registro agudo, un daño que los especialistas confirman que es irreversible.

Continúa en escena pese al desgaste

Pese a las secuelas, Hugh Jackman no dejó de actuar en musicales ni en producciones en Broadway. Entre 2021 y 2023, volvió a las tablas con “The Music Man” y ofreció presentaciones en solitario, demostrando una disciplina ejemplar y un compromiso con su arte. Sin embargo, los médicos advierten que el daño acumulado en sus cuerdas vocales durante años interpretando a Wolverine es imposible de revertir completamente.

En entrevistas recientes, Jackman admitió que su falsete ya no es tan fuerte como antes, una confesión que evidencia el costo de su dedicación a un papel que lo llevó a límites físicos y vocales extremos. A pesar de ello, su legado en el universo Marvel permanece intacto, y ningún otro actor ha logrado igualar la huella que dejó en la cultura popular como Wolverine.

La historia de Hugh Jackman refleja cómo la pasión y la entrega pueden tener un precio alto en la salud, pero también muestra cómo la disciplina puede prolongar una carrera artística en condiciones adversas. Su ejemplo sigue siendo una referencia para actores y músicos que enfrentan exigencias similares en sus carreras profesionales.