Trump ordena despliegue militar en Portland y declara a Antifa terrorista en una escalada sin precedentes

Trump anuncia una ampliación de las fuerzas militares en ciudades estadounidenses

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este sábado una nueva fase en el despliegue de tropas militares en varias ciudades del país. La medida fue tomada en respuesta a recientes disturbios y ataques contra instalaciones federales en Portland, Oregon.

En un mensaje publicado en su plataforma Truth Social, Trump afirmó que la decisión responde a una solicitud de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem. Según sus palabras, ordenó al secretario de Defensa, Pete Hegseth, que movilizara «todas las tropas necesarias» para proteger Portland, una ciudad que, según el mandatario, se encuentra «devastada por la guerra». Además, mencionó la protección de instalaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que también han sido objeto de ataques.

Una respuesta contundente ante la violencia y las protestas

Trump añadió que se autoriza «toda la fuerza, si es necesario», en un contexto donde intensifica su campaña contra grupos que, según él, fomentan la violencia política. En particular, el mandatario ha centrado su atención en el movimiento Antifa, al que acusa de ser responsable de la escalada de violencia en varias ciudades americanas.

El lunes pasado, Trump firmó un decreto que designa a Antifa como una organización terrorista nacional. Sin embargo, existen dudas legales sobre la aplicabilidad de esa clasificación, ya que Antifa no es una organización formal, sino un conjunto de colectivos de extrema izquierda que se oponen a neonazis y supremacistas blancos. La ambigüedad en su definición complica su inclusión en listas oficiales del gobierno.

Contexto y antecedentes de la escalada de violencia

El mandatario ha denunciado que algunas instalaciones del ICE están siendo «asediadas» por «antifas y otros terroristas domésticos». Aunque Trump ya ordenó intervenciones en otras ciudades, esta es la primera vez que menciona el uso de la «fuerza total» para controlar la situación en Portland.

El viernes pasado, Trump advirtió sobre una supuesta situación de «anarquía» en Portland, donde se registran protestas contra las políticas migratorias y ataques a sedes de organismos federales, incluyendo el centro de detención del ICE. El presidente ha acusado a los manifestantes de intentar quemar edificios y ha asegurado que el movimiento Antifa utiliza «medios ilegales» para promover violencia y terrorismo a nivel nacional.

El aumento de la tensión y las acusaciones oficiales

En sus declaraciones públicas y en redes sociales, Trump ha responsabilizado a grupos vinculados a Antifa por el incremento de la violencia en protestas desde la muerte de George Floyd en 2020. El secretario de Justicia, William Barr, también relacionó estos incidentes con actividades de la organización, calificándolos como un ejemplo de «terrorismo nacional».

El decreto firmado por Trump instruye a las agencias federales a emplear todos los recursos disponibles para investigar y desarticular operaciones ilegales relacionadas con estos grupos. Asimismo, la legislación busca investigar y detener acciones violentas que puedan estar siendo financiadas por simpatizantes de Antifa o similares, además de promover la vigilancia en línea y la protección de posibles víctimas.

Estas acciones reflejan la estrategia del gobierno estadounidense para responder a la violencia política, en un contexto donde las protestas y disturbios han marcado los últimos años en varias ciudades del país. La postura de Trump ha generado controversia, con detractores que consideran que estas medidas pueden intensificar la polarización y la tensión social.