¡Clima extremo en Ucrania frena drones y pone en riesgo a tropas en medio de la ofensiva rusa!

El clima extremo complica las operaciones militares en Ucrania

Las condiciones meteorológicas adversas en Ucrania, caracterizadas por temperaturas en descenso y lluvias persistentes, están dificultando significativamente las operaciones militares en la región. La presencia de nieve y barro reduce la efectividad de los drones, expone a la infantería a mayor riesgo y complica la logística en caminos embarrados, afectando tanto a las fuerzas rusas como a las ucranianas.

Impacto en las estrategias y movimientos de las tropas

Aunque estas condiciones podrían ralentizar los avances de las tropas rusas, expertos indican que no serán suficientes para detenerlas por completo. Rusia mantiene una fuerte presión en el frente, apoyada en su superioridad numérica y en ataques constantes de infantería, según informaron varias fuentes a la agencia EFE. La disminución del follaje en esta temporada dejará más expuesta a la infantería rusa, que habitualmente se desplaza por bosques en el este y sur de Ucrania para evitar la detección por parte de los drones ucranianos.

Por otro lado, esta reducción de cobertura también dificultará que las tropas ucranianas oculten sus posiciones de los drones rusos, especialmente en áreas menos pobladas. Oleksí Melnik, analista militar del Centro Razumkov, señaló que esta situación afecta más a los atacantes, que deben desplazarse y exponerse más, mientras que los defensores pueden aprovechar otros métodos de camuflaje.

Condiciones meteorológicas y su efecto en la infraestructura militar

Las lluvias intensas y el frío también afectan el desplazamiento de las fuerzas, ya que reducen la capacidad de los vehículos para circular fuera de las carreteras pavimentadas. El general Andrí Gnatov, jefe del Estado Mayor ucraniano, advirtió que el terreno fangoso obliga a depender de caminos pavimentados, los cuales se han convertido en zonas peligrosas llenas de vehículos destruidos. La dependencia de estas rutas hace que los movimientos militares sean más vulnerables a los ataques.

El estado del suelo favorece a Rusia, que ha adaptado sus operaciones a ataques de infantería a pie. La humedad y el frío también representan un desafío para el uso de drones, fundamentales para la vigilancia y los ataques en el conflicto. Las condiciones extremas pueden dañar la electrónica, reducir la autonomía de vuelo y disminuir la efectividad de los ataques rusos contra las líneas ucranianas.

Consecuencias para la logística y la defensa

Estos factores climáticos ofrecen un respiro a las fuerzas ucranianas, que enfrentan escasez de suministros y dificultades para evacuar heridos. La humedad y el frío también afectan la capacidad de la infantería para protegerse de los bombardeos, ya que deben excavar trincheras profundas para resguardarse. Pavlo, un soldado de unos 30 años en Donetsk, comentó que en las noches el frío se vuelve casi insoportable, penetrando hasta lo más profundo de la piel, sin importar cuán abrigado esté.

Mientras tanto, voluntarios civiles distribuyen calentadores y suministros para aliviar las duras condiciones en el frente. La temporada invernal, aunque presenta desafíos, también influirá en el curso del conflicto, limitando algunos movimientos y favoreciendo a las defensas ucranianas en ciertas áreas.