Universitario de Deportes conquista su tercer título consecutivo en la Liga 1: claves de la histórica coronación

Tras nueve años sin títulos, Universitario de Deportes ha protagonizado uno de los procesos más destacados en la historia reciente de la Liga 1 peruana. El club, que atravesó momentos críticos y estuvo al borde del descenso, hoy celebra con orgullo su vigésimo noveno trofeo en sus vitrinas.

La estrecha conexión entre la hinchada y el equipo refleja la magnitud de este logro, que cierra un ciclo de éxitos y reafirma la hegemonía del cuadro estudiantil. Hasta el pitazo final de Kevin Ortega en el estadio Unión Tarma, Universitario no conoció derrota en el Torneo Clausura 2025. Se coronó invicto y, con dos jornadas por jugar, busca establecer una nueva marca en el fútbol peruano.

Este año no estuvo exento de dificultades y cuestionamientos. Sin embargo, la consolidación de un proyecto, un plantel sólido y un cuerpo técnico comprometido marcaron la diferencia frente a una realidad marcada por la rotación constante en los procesos deportivos. A continuación, se analizan las claves que llevaron a la consagración del equipo ‘merengue’.

• Imbatibilidad: El equipo capitalino mantuvo su racha invicta durante todo el torneo, desde el empate ante Cienciano en Cusco hasta la victoria en Tarma. Solo cedió puntos en casa frente a Alianza Lima, en un empate sin goles, demostrando una solidez defensiva y ofensiva en todo momento.
• Identidad táctica: La estructura con tres defensores, dos carrileros, tres mediocampistas y dos delanteros ha fortalecido la solidez del equipo en los últimos tres años. Jorge Fossati implementó esta estrategia con rapidez, y Fabián Bustos la mantuvo sin alterarla, consolidando una idea clara y efectiva. La vuelta del ‘Nonno’ reforzó aún más la cohesión del plantel.
• Estrella goleadora: Álex Valera ha sido la carta más importante en ataque. Con 17 goles y seis asistencias, se perfila como uno de los mejores jugadores del campeonato. Su rendimiento, especialmente tras el desencuentro con Hernán Barcos en el clásico, fue fundamental, logrando seis tantos en ocho partidos y destacándose en la fase decisiva.
• Capacidad de adaptación: Tras la derrota por 4-0 ante Palmeiras en la Copa Libertadores, Fossati realizó ajustes en el once, sustituyendo a Aldo Corzo, Edison Flores y Williams Riveros por jugadores en mejor forma física y técnica. César Inga, Jairo Vélez y Anderson Santamaría demostraron un nivel sobresaliente, asegurando su titularidad.
• Superación en las plazas altas: Universitario logró resultados destacados en escenarios de altura, como Cusco (3,399 m.s.n.m.), Juliaca (3,825 m.s.n.m.) y Arequipa (2,335 m.s.n.m.), entre otros. En temporadas anteriores, estas plazas representaban un obstáculo, pero en esta campaña el equipo las sorteó con éxito, demostrando fortaleza física y mental.

El triunfo en Tarma, donde remontó un marcador adverso, simboliza la culminación de un ciclo exitoso y la consolidación de un proyecto que ha sabido adaptarse y crecer en un escenario competitivo cada vez más exigente.