¡Estados Unidos a punto de paralizar su ayuda alimentaria en medio de un cierre gubernamental histórico!

Estados Unidos enfrenta un cierre gubernamental que impacta en programas sociales

La nación norteamericana alcanzará a la medianoche un hito simbólico: un mes completo con el gobierno federal cerrado. Esta situación provocará la interrupción de un importante programa público de asistencia alimentaria, del cual dependen millones de estadounidenses.

Luego de más de cuatro semanas de paralización, que ha dejado sin empleo a miles de empleados federales, ha afectado el tráfico aéreo y cerrado numerosos parques nacionales, los efectos del bloqueo comienzan a extenderse a otros sectores esenciales del país.

Impacto en la asistencia alimentaria y conflictos legales

El programa de asistencia alimentaria SNAP, que beneficia a más de 42 millones de personas, enfrentará una suspensión en sus pagos a partir del 1 de noviembre. La secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, advirtió que los fondos del programa se están agotando tras un mes de cierre gubernamental.

En respuesta, más de 20 estados liderados por demócratas presentaron demandas contra la administración de Donald Trump, exigiendo que se utilicen fondos de emergencia para mantener la financiación del programa. Se espera que un juez federal emita una decisión sobre esta disputa el 31 de octubre.

Costos de Obamacare podrían aumentar por la crisis

Además, el 1 de noviembre se harán públicos los nuevos costos del seguro médico bajo el programa federal «Obamacare». Debido a la expiración de los subsidios públicos a finales de 2025, se prevé que los precios se incrementen considerablemente. Según el centro de estudios KFF, quienes pagaban un promedio de 888 dólares en 2025, podrían pagar hasta 1.906 dólares en 2026.

La Oficina de Presupuesto del Congreso advierte que más de 4 millones de estadounidenses podrían perder toda su cobertura sanitaria si la situación persiste.

Estancamiento en las negociaciones y opiniones públicas

El desacuerdo entre republicanos y demócratas sobre el presupuesto es la raíz del enfrentamiento. Los republicanos, liderados por Donald Trump, proponen extender el presupuesto actual sin cambios en los niveles de gasto, mientras que los demócratas buscan mantener los subsidios de Obamacare.

Aunque los republicanos tienen mayoría en el Senado, necesitan votos demócratas para aprobar un nuevo presupuesto, y en las últimas semanas las negociaciones han sido prácticamente inexistentes. La opinión pública también ha señalado a los legisladores republicanos como principales responsables del estancamiento, según una encuesta de ABC y The Washington Post, donde el 45% culpa a Trump y su partido.

Declaraciones y posibles soluciones

El expresidente Donald Trump calificó el cierre como ‘ridículo’ y sugirió que los próximos plazos para el SNAP y Obamacare podrían forzar a los senadores a ceder. Por ahora, aunque en octubre se pagaron los salarios militares gracias a una decisión presidencial, no hay garantías de que esto continúe en noviembre.

La tensión aumenta ante la posibilidad de que más empleados federales, incluidos los militares, se queden sin salario. Trump ha instado a los republicanos a eliminar el requisito de 60 votos en el Senado para aprobar leyes presupuestarias, una medida que podría acelerar la resolución, aunque enfrenta resistencia interna en su partido.

Mientras tanto, la crisis continúa, y el país espera que se encuentren soluciones pronto para evitar un impacto aún mayor en los servicios públicos y programas sociales esenciales.