Joven atleta completa media maratón con vómitos y descubre que tiene cáncer en estado avanzado

Karina Ureña, una joven atleta que enfrentó un diagnóstico inesperado

Karina Ureña, de 30 años, se preparaba con entusiasmo para su primera media maratón en Estados Unidos, programada para febrero de 2025. Durante meses, entrenó arduamente, manteniendo un estilo de vida saludable. Sin embargo, a pocos meses de la carrera, comenzó a experimentar episodios de náuseas y vómitos frecuentes, lo que la llevó a preocuparse. Inicialmente pensó que se trataba simplemente de cólicos menstruales, pero los síntomas se intensificaron rápidamente, acompañados de dolor intenso y malestar constante.

Los primeros signos y la respuesta médica inicial

Karina, según informó el Daily Mail, creía que su malestar tenía que ver con su ciclo menstrual. Era una persona que cuidaba su alimentación, corría todos los días y se sentía más saludable que nunca, por lo que no consideró la posibilidad de una enfermedad grave. Sin embargo, sus síntomas se volvieron cada vez más severos, y en medio de la carrera, vomitó en varias ocasiones, pero decidió continuar y completar la media maratón.

Un diagnóstico que cambió su vida

Tras la carrera, Karina acudió a urgencias, pero los médicos minimizaron su situación, atribuyéndola a una posible gastroenteritis o desequilibrio hormonal, y le recetaron medicamentos sin realizar estudios exhaustivos. No fue sino hasta febrero de ese año, cuando consultó a su médico de cabecera, que se le realizó una tomografía que reveló la gravedad: un cáncer de colon en etapa cuatro. La masa, de aproximadamente 9.6 centímetros, también había afectado sus ovarios, hígado y pulmones, señal de una diseminación avanzada.

Tratamiento y expectativas

El diagnóstico impactó profundamente a Karina, quien inicialmente fue sometida a una histerectomía total para extirpar útero y ovarios, en busca de detener la progresión del cáncer. Sin embargo, esto fue una carga emocional muy fuerte para ella, que sueña con ser madre en el futuro. En marzo, se sometió a una cirugía menor para remover el tumor más grande del ovario derecho, durante la cual también le extrajeron tejido del colon, lo que resultó en la colocación de una bolsa de colostomía.

La joven describe ese momento como un shock tremendo. A partir de entonces, inició un ciclo de 11 sesiones de quimioterapia para intentar frenar la enfermedad. Actualmente, continúa con su tratamiento y busca opciones médicas que le permitan conservar su útero, con la esperanza de ser madre en el futuro.

Mensaje de esperanza y advertencia

Karina comparte un mensaje importante con jóvenes de su edad: «Escucha a tu cuerpo. No ignores el dolor persistente ni los cambios que no parecen normales. La prevención puede salvarte la vida». Reconoce que si hubiera acudido antes al médico, tal vez su situación sería diferente. Sin embargo, mantiene su espíritu de lucha y afirma: «Lo único que puedo hacer ahora es luchar, y no me voy a rendir».

Su historia resalta la importancia de estar atentos a los signos de nuestro cuerpo y acudir a la consulta médica ante cualquier anomalía. La detección temprana puede marcar la diferencia en enfermedades como el cáncer de colon, que en etapas avanzadas puede ser mortal.