¡Jubilado de 80 años golpea y agrede a joven por estacionar en Buenos Aires!

Resumen del incidente

El pasado miércoles en el barrio de Villa del Parque, en Buenos Aires, ocurrió un altercado que generó gran repercusión en las redes sociales. Agustina Robledo, una joven de 23 años, fue víctima de una agresión por parte de su vecino jubilado, tras un episodio aparentemente trivial relacionado con su vehículo.

Detalles del suceso

Según informes, Agustina fue a su vivienda tras salir del trabajo para recoger su equipo de gimnasio. Dejó su auto estacionado en la calle por unos diez minutos, en un momento en que el tráfico en su barrio no era intenso. Sin embargo, esa breve ausencia fue suficiente para que su vecino, un hombre de 80 años, reaccionara con violencia.

El jubilado, al parecer molesto por la presencia del vehículo, comenzó a golpearlo y acusó a Agustina de bloquear la entrada a su garaje. La joven, al verse confrontada, salió a interpelarlo y en ese momento ocurrió lo inesperado.

La agresión y su repercusión

Todo quedó registrado en un video que se viralizó rápidamente. En las imágenes, se puede escuchar a Agustina preguntándole: «¿Qué haces? Le pegaste una patada a mi auto». Ante esto, el anciano, al escuchar que era grabado, se acercó y le propinó un golpe en el rostro, dejando visible un labio cortado. La agresión fue detenida solo gracias a la intervención de otro vecino que acudió en ayuda de la joven.

La situación fue denunciada formalmente ante la justicia, que imputó al jubilado por lesiones leves agravadas por violencia de género. Además, se dictó una orden de restricción, prohibiéndole acercarse o comunicarse con Agustina. Si ambos llegaran a cruzarse en el barrio, el agresor debe mantener una actitud «cordial y respetuosa» con la víctima.

Consecuencias para la conductora

Mientras tanto, la joven enfrenta otras complicaciones. La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) informó que le suspendieron la licencia de conducir por «conducta temeraria» al volante. La decisión se basó en denuncias anónimas y en videos donde Agustina se muestra manejando a velocidades superiores a los 150 km/h, grabándose a sí misma en el proceso.

Agustina expresó su arrepentimiento y reflexión tras la sanción: «Quizás todo esto me pasó por algo. Yo manejaba de esa manera y ahora entiendo el peligro que eso representa. Soy creyente y creo que Dios puso esto en mi camino para que aprenda. Fue una señal para cambiar antes de que sucediera algo peor». La joven aseguró que ha cambiado su forma de conducir y que busca enmendar sus errores.

Este caso ha generado un debate sobre la violencia en incidentes de tránsito y la responsabilidad de los conductores, así como sobre la importancia de la gestión emocional en situaciones de conflicto en la vía pública.