Controversia por ingreso de pareja de congresista de Perú Libre a su despacho

Parlamentaria de Perú Libre ha sido nuevamente objeto de críticas por su conducta en el Congreso. En esta ocasión, se cuestiona que Kelly Portalatino permitió el ingreso reiterado de su pareja, Aldahir Milton Zevallos Pachau, quien cumple una condena por robo agravado, a su despacho parlamentario.

Historia de su pareja, Aldahir Zevallos

El sindicado como pareja sentimental de la congresista fue detenido en 2017 en Huancayo, Junín, durante un operativo policial que logró rescatar a un taxista retenido varias horas en la maletera de su vehículo.

La intervención policial culminó con la detención de Zevallos Pachau, quien portaba un arma de fuego, junto a otros cómplices. Todos ellos fueron procesados y sentenciados por robo agravado.

Tras cumplir su condena y ser liberado, Zevallos mantuvo públicamente una relación sentimental con Kelly Portalatino, lo que ha generado controversia en el ámbito político y social.

Visitas y presencia en el despacho parlamentario

Según registros de visitas a los que tuvo acceso la sección dominical, el exrecluso permanecía largas horas en la oficina de la legisladora, sin tener un vínculo contractual formal con el Congreso.

En algunos días de julio y agosto, fue visto desde las 10:37 de la mañana hasta las 5:00 de la tarde, repitiendo este patrón en varias ocasiones.

Respuesta de Kelly Portalatino ante las críticas

Al ser consultada inicialmente por la prensa, la legisladora evitó reconocer que ingresaba a su despacho a una persona sentenciada. «¿Sentenciada de qué? Dígame usted, por favor», expresó antes de nombrar al hombre en cuestión.

Asimismo, defendió a su pareja y afirmó: «Es lamentable, ¿no? Esta es una reacción de estos mecanismos de la oposición». Añadió que no podía juzgar a las personas y que todos merecen oportunidades para reivindicarse en la sociedad.

Portalatino calificó el delito de Zevallos como un «error humano» y expresó que, en su opinión, todos cometen errores en su juventud. Además, sostuvo que los ataques políticos en su contra son parte de la campaña electoral.

Sobre las visitas a su despacho

Cuando fue interrogada sobre la naturaleza de estas visitas, la congresista afirmó: «Tengo la libertad de acceder a las personas de mi entera confianza». También se negó a proporcionar mayores detalles, argumentando: «No voy a responder más porque son temas de alta confianza de mi despacho. Él ya cumplió su pena y, por lo tanto, no se le puede limitar».

Reacciones y opiniones de expertos

José Cevasco, exoficial mayor del Congreso, calificó la situación como «un exceso de la congresista». Desde su perspectiva, en una empresa privada esto no sucedería, ya que el dueño de la misma cuestionaría la presencia de alguien que no trabaja allí.

Cevasco añadió con tono irónico: «Esos lujos no se le pueden permitir a un empleado público. Quizás es una musa de inspiración para el trabajo parlamentario. De repente, al verla, le sale un proyecto de ley de la cabeza».

Cuestionamientos internos y contexto

Los cuestionamientos aumentaron cuando en el propio local partidario de Perú Libre, donde Zevallos trabajaba como vigilante, mencionaron que podría ser ubicado en el Congreso, fortaleciendo las sospechas sobre sus visitas frecuentes al poder del Estado.