Chofer de camioneta involucrado en tragedia en Arequipa: «También estoy afectado»

Declaraciones de Henry Apaclla Ñaupari tras accidente en Ocoña

Henry Apaclla Ñaupari (35), investigado por homicidio culposo agravado y lesiones culposas tras el trágico accidente de tránsito ocurrido en Ocoña, Arequipa, que dejó 37 personas fallecidas y más de veinte heridos, brindó sus primeras declaraciones ante la justicia. El conductor, quien arrojó un resultado positivo en el dosaje etílico, aseguró que colaborará con las diligencias, aunque solicitó que no se le impongan medidas restrictivas.

Asimismo, el imputado, quien llegó a la audiencia con una venda en la cabeza, expresó sentirse afectado por lo ocurrido. Además, manifestó su preocupación por su estado de salud, ya que hasta ese momento no había sido evaluado por un especialista y solo había recibido analgésicos.

«Lamento todo lo sucedido con las víctimas. Me pongo en su lugar y estoy dolido. Estoy a disposición de la justicia, pero también quiero cuidar de mi bienestar. Hasta ahora no he sido revisado por un neurólogo ni se me ha realizado una radiografía. Estoy preocupado porque me duele la cabeza», declaró Apaclla ante el juzgado.

Posible pena de hasta 8 años de prisión

Por ahora, Apaclla Ñaupari cumple siete días de detención preliminar. De confirmarse los cargos en su contra, el Ministerio Público estima una pena de hasta ocho años de cárcel. Entre las diligencias programadas se incluyen las declaraciones de testigos y sobrevivientes, un informe pericial de necropsia, el peritaje de daños, la evaluación mecánica de los vehículos, así como la revisión de las historias clínicas de los heridos y un informe técnico policial que permitirá determinar las causas precisas del accidente.

La defensa del conductor ha asegurado que tanto la empresa donde trabaja Apaclla como la compañía Llamosa garantizan las indemnizaciones correspondientes. Sin embargo, solicitaron que no se ordene una detención preliminar, considerando que sería una medida excesiva en este caso.

El último adiós a las víctimas del accidente

El 13 de noviembre, en la ciudad de Camaná, se realizaron los funerales de las víctimas del siniestro del bus de la empresa Llamosas. Fueron sepultados Alan Álvarez Rivas (39), su padre Guillermo Álvarez Pérez (63) y su primo Óscar Pérez Cahuana (33). Los tres viajaban en el vehículo que se desbarrancó la noche del martes 11, en el kilómetro 780 de la Panamericana Sur.

El sepelio reunió a familiares y colegas del sector comercial. Álvarez, conocido como “Dani”, era distribuidor mayorista y dejó una esposa y dos hijos menores. Una de sus compañeras recordó: “La vida es una sola, demos todo lo bueno aquí”.

En la morgue de Camaná, todavía permanecen tres cuerpos sin reclamar: Jhossef Hernán Torres Reyes (31), originario de Anta (Cusco), y los esposos Mauro Felipe Gálvez Ampa y Medarda Romero Flores, residentes en Huancayo.

Los familiares del conductor del bus, Marcos Francisco Ruelas Condori (64), expresaron su molestia por la demora en la entrega de sus restos, ya que fue sometido a una necropsia para descartar consumo de sustancias o alguna condición médica previa. “Solo quiero que descanse en paz y que esto no quede impune”, afirmó su hijo.

Además, existen preocupaciones respecto a un maletín con S/ 5,000, que actualmente está bajo custodia de la Policía Nacional del Perú (PNP). La víctima que lo portaba también falleció en el accidente. Los familiares temen que el dinero no sea devuelto en su totalidad, ya que algunos sobrevivientes han denunciado robos de pertenencias durante el rescate. Leonarda Condori (59) afirmó: “Nos quitaban los celulares”, y otros señalaron la pérdida de dinero y objetos personales.

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