Trump envía dos submarinos nucleares en respuesta a las amenazas de Medvédev

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó el despliegue de dos submarinos nucleares en respuesta a las recientes declaraciones del expresidente ruso Dmitri Medvédev, quien advirtió sobre una posible escalada bélica entre ambos países. La medida, anunciada este viernes a través de la plataforma Truth Social, busca reforzar la postura estadounidense ante lo que considera provocaciones peligrosas.

Trump explicó que la decisión se tomó debido a las declaraciones «insensatas e incendiarias» de Medvédev, actual vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, y añadió que las palabras pueden tener consecuencias imprevistas. Aunque no reveló la ubicación exacta de los submarinos, afirmó que el despliegue tiene como objetivo principal proteger a los ciudadanos estadounidenses ante posibles acciones adversas.

Por otra parte, Medvédev criticó duramente el ultimátum que Estados Unidos impuso a Rusia para que detenga su participación en la guerra en Ucrania. En su cuenta de X (antes Twitter), advirtió que la presión puede aumentar el riesgo de un conflicto directo, señalando que «cada nuevo ultimátum es un paso hacia la guerra», aunque no necesariamente entre Rusia y Ucrania, sino también con Estados Unidos.

El exmandatario estadounidense ha manifestado en varias ocasiones su frustración por la negativa de Vladimir Putin a detener los ataques en Ucrania. En un reciente mensaje, Trump redujo el plazo para que Moscú acepte una tregua a solo 10 días, insistiendo en la urgencia de poner fin a la conflicto.

En el aspecto humanitario, Trump también compartió cifras alarmantes: afirmó que casi 20,000 soldados rusos han muerto en el conflicto este mes, sumando un total de 112,500 en lo que va de año. Además, mencionó que Ucrania ha sufrido la pérdida de aproximadamente 8,000 soldados desde principios de 2025, sin contar a los desaparecidos.

El expresidente estadounidense expresó su deseo de detener esta guerra que, según él, nunca debería haber ocurrido. Culpa en parte a la administración de Joe Biden, y concluyó diciendo: «Estoy aquí para ver si puedo detenerla». Esta serie de declaraciones refleja la creciente tensión en el escenario internacional y la preocupación por una posible escalada bélica entre las potencias mundiales.