Escuchó ruidos extraños en un hueco de la cocina, introdujo su celular para grabar lo que sucedía y se llevó una sorpresa desagradable

Un episodio inesperado sorprendió a un joven en su departamento cuando ruidos extraños provenientes de la cocina captaron su atención una madrugada. Todo comenzó alrededor de las 4 de la mañana, cuando la gata del joven que subió el video que se hizo viral en TikTok (@elsecuen__) empezó a mostrar un comportamiento inusual: la mascota gruñía insistentemente en dirección a un pequeño agujero localizado en la pared de la cocina.

Ese comportamiento, sumado a los persistentes ruidos desconocidos, despertó su curiosidad y también su preocupación. Tras unos momentos de incertidumbre e intriga, el joven decidió actuar y averiguar la causa de esas misteriosas señales que interrumpían la tranquilidad nocturna de su hogar.

Motivado por la inquietud y el deseo de resolver el enigma, el joven improvisó una solución utilizando su teléfono celular. Con la intención de descubrir qué se escondía al otro lado del agujero, activó la cámara de su teléfono, encendió el flash y lo introdujo en el reducido espacio de la pared. La idea era grabar un video que le permitiera ver lo que había adentro, puesto que el orificio era demasiado pequeño para una inspección directa. El joven narró en el video que compartió posteriormente cómo se le ocurrió esta alternativa tras observar la reacción de su mascota y cómo lo sorprendió lo que encontró en la grabación.

La sorpresa fue tan desagradable como inesperada. Al revisar el video grabado con el celular, el joven descubrió que el responsable de los ruidos nocturnos y del malestar de su gata era una comadreja que se había instalado en el interior del agujero de la cocina. La captura de imagen dejó en claro el origen de los crujidos y gruñidos que lo habían mantenido en vilo durante la noche. “El susto que nos pegamos anoche”, relató en el video, poniendo en palabras la mezcla de sobresalto y alivio que sintió al poder identificar sin margen de dudas la fuente de los sonidos.

La experiencia no terminó ahí. Decidido a compartir el insólito hallazgo, el joven subió el video a TikTok, donde el relato y el registro audiovisual rápidamente comenzaron a circular entre los usuarios de la plataforma. En cuestión de días, la historia cruzó las fronteras de su entorno personal y se convirtió en un fenómeno viral. El video sumó en solo 10 días más de 661 mil reproducciones, superó los 65 mil “me gusta” y acumuló alrededor de 2.100 comentarios, reflejando el interés y la empatía de miles de personas que se sintieron cautivadas por la situación.

Entre los comentarios que inundaron la publicación, muchos usuarios se preocuparon por el destino de la comadreja, manifestando opiniones que iban desde pedir que no se lastimara al animal hasta sugerir adoptarla. «Es una comadreja eso, no la mates, son inofensivas», escribió un usuario, buscando tranquilizar y promover el respeto por la fauna urbana. Otros, con humor o simpatía, aseguraron que si un espacio en la pared estaba vacío, era lógico que es la casa de la comadreja. Incluso hubo quienes fantasearon con la posibilidad de adoptar al animal como mascota.

El episodio puso en evidencia cómo experiencias cotidianas pueden volverse virales en cuestión de horas, especialmente cuando mezclan misterio, sorpresa y la convivencia, no siempre armónica, de la vida urbana con la fauna silvestre. La historia también refleja el impacto de las redes sociales como espacio de intercambio de experiencias personales y como foro de debate sobre la relación entre humanos y animales. El joven, que en la madrugada solo buscaba dormir en paz y resolver un misterio doméstico, terminó involuntariamente protagonizando una historia que generó conversación, risas y reflexiones entre miles de desconocidos.