Ricardo Gareca sorprende al revelar tensión con Claudio Pizarro y su impacto en la historia del fútbol peruano

Ricardo Gareca visita Perú en una escala breve para acompañar a Edwin Oviedo en la presentación de su libro en la Feria del Libro de Lima. La presencia del técnico argentino en el país coincidió con su participación en un acto literario, pero también le permitió atender a medios de comunicación y hablar sobre su gestión en la selección peruana de fútbol.

Uno de los temas más relevantes abordados por Gareca fue su relación con Claudio Pizarro, uno de los delanteros más destacados en la historia del fútbol peruano. Cuando Gareca asumió la dirección técnica en 2015, Pizarro formaba parte del equipo, y juntos lograron hitos importantes, como la clasificación a la Copa del Mundo de 2018 y la conquista de un subcampeonato en la Copa América. Sin embargo, su relación comenzó a deteriorarse con el tiempo, principalmente por la decisión de no incluirlo en la lista definitiva para el Mundial de Rusia, una decisión que generó controversia y malestar en el jugador.

En una entrevista con el programa Full Deporte, Gareca explicó que, aunque Pizarro era un jugador de gran calidad y experiencia en Europa, su selección se basó en la meritocracia. “Dejarlo fuera fue un dolor de cabeza, no por falta de respeto, sino por el nivel del jugador”, afirmó. El técnico añadió que la decisión estuvo motivada por la necesidad de apostar por otros futbolistas que consideraba más adecuados en ese momento, como Raúl Ruidíaz, quien tuvo un papel determinante en el proceso clasificatorio.

La tensión entre ambos se intensificó en 2018, cuando Pizarro expresó públicamente su descontento por no haber sido convocado al Mundial, afirmando que no entendía la decisión del cuerpo técnico. Gareca, por su parte, interpretó esas declaraciones como una autoexclusión del futbolista, lo que llevó a que Pizarro respondiera desde Alemania asegurando que nunca se autoexcluyó y criticando la actitud de la prensa peruana, a la que acusó de fomentar una narrativa falsa.

A pesar de su vigencia en el fútbol europeo, Pizarro nunca volvió a vestir la camiseta de Perú tras esa polémica, y tuvo que seguir sus logros deportivos desde la distancia, incluyendo la clasificación al Mundial y el subcampeonato en la Copa América. La relación entre el técnico y el delantero quedó marcada por diferencias, aunque ambos mantienen un respeto mutuo por su pasado compartido en la selección peruana.