De viaje en Perú a nueva vida en Inglaterra: la increíble historia de Radley y el perro callejero que conquistó su corazón

Una aventura que cambió vidas: de un perro callejero en Perú a un nuevo hogar en Inglaterra

Durante un viaje por el Valle Sagrado de los Incas, una experiencia inesperada modificó los planes de Mirelle Radley, una viajera británica. Lo que comenzó como unas vacaciones en Perú se transformó en una historia de empatía y compromiso que involucró a un perro callejero y su propia vida.

El encuentro con Paddington y la decisión de ayudarlo

Radley, de 30 años y originaria de Sheffield, conoció a un perro que la siguió de manera insistente desde el primer momento en un pequeño pueblo de la región andina. La joven lo llamó Paddington, en honor al famoso oso de la literatura infantil, y pronto se convirtió en un compañero inseparable de sus paseos y actividades diarias. La persistencia del animal y su comportamiento cercano despertaron en ella una sensación de responsabilidad.

La turista explicó que, en un principio, no tenía intención de adoptar una mascota durante su viaje. Sin embargo, la insistencia del perro y ciertas coincidencias, como su acercamiento mientras descansaban en una hamaca, la hicieron entender que debía hacer algo para salvarlo. La historia de Paddington se convirtió en una misión personal que la llevó a planear su traslado a Inglaterra.

Los obstáculos y esfuerzos para traerlo a Reino Unido

El proceso de trasladar a un animal desde Sudamérica a Europa no es sencillo. Requiere cumplir con múltiples requisitos sanitarios, permisos y afrontar gastos elevados. Radley no se rindió ante estos obstáculos. Desde el inicio, lanzó campañas en redes sociales y buscó apoyo económico para costear vacunas, análisis y trámites internacionales.

Con la ayuda de la organización local Colitas Con Canas, que le brindó asesoría y un hogar temporal para Paddington, la joven inició los pasos necesarios. La campaña en Instagram, donde compartía el proceso, alcanzó más de 400.000 seguidores, quienes se convirtieron en un respaldo fundamental para mantener la motivación y obtener recursos.

Retos en el viaje y la llegada a Inglaterra

El traslado enfrentó contratiempos, como un problema en la documentación en la frontera con Francia, que impidió que Paddington cruzara hacia Reino Unido. Radley tuvo que recorrer varios países europeos en busca de soluciones, visitando veterinarios en Bélgica y realizando más revisiones. Finalmente, las autoridades confirmaron que todo estaba en orden, permitiendo que cruzara el Canal de la Mancha.

El reencuentro en Cambridge fue emotivo. Paddington, que en las calles de Perú vivía en la calle y en condiciones precarias, ahora se adaptaba a una nueva vida en un entorno diferente. Radley comentó que el perro parecía muy cómodo y que su proceso de adaptación fue más rápido de lo esperado, aunque algunos aspectos cotidianos, como las escaleras y la lavadora, le resultaron confusos al principio.

Un final feliz y un nuevo comienzo

Hoy, Paddington pasea por parques y calles de la ciudad universitaria, lejos de la incertidumbre y peligros de las calles andinas. La historia de Radley y Paddington refleja cómo un acto de empatía puede transformar vidas, inspirando a otros a actuar frente a situaciones similares. La historia continúa en las redes sociales, donde la comunidad sigue apoyando y compartiendo el ejemplo de esta conmovedora adopción internacional.