Texas aprueba nuevo mapa electoral impulsado por Trump para favorecer 5 escaños republicanos y diluir votos de minorías

Texas aprueba un nuevo mapa congresional a petición de Trump

El pasado miércoles, la Cámara de Representantes de Texas, controlada por los republicanos, dio luz verde preliminar a un nuevo mapa electoral que podría modificar cinco escaños en la Cámara de Estados Unidos actualmente en manos de los demócratas. Esta modificación fue diseñada tras la solicitud del expresidente Donald Trump, con el objetivo de favorecer a su partido en las elecciones legislativas de medio término del próximo año.

Este cambio en el mapa se produce después de que decenas de legisladores demócratas interrumpieran el proceso mediante una prolongada huelga de dos semanas para bloquear la aprobación de la propuesta. La medida, que buscaba rediseñar los distritos electorales, fue finalmente aprobada tras su regreso a la sesión, aunque los demócratas denunciaron que no se les permitió acceder a la versión final del mapa durante las audiencias públicas.

Reacciones y controversias en Texas

Durante la sesión, varios legisladores demócratas expresaron su rechazo al nuevo mapa. El representante John Bucy afirmó que el rediseño buscaba diluir el peso del voto de comunidades negras, latinas y asiáticas, y criticó que los republicanos cayeran en la influencia de Trump. “Esto no es democracia, es autoritarismo en tiempo real”, declaró Bucy. “Este mapa fue diseñado deliberadamente para crear cinco escaños más para los republicanos, porque Trump sabe que los votantes rechazan su agenda”.

Por su parte, los republicanos defendieron la medida, asegurando que el nuevo mapa mejorará su rendimiento electoral y aumentará los distritos con mayoría hispana. La aprobación en la Cámara de Texas fue impulsada por la presión de Trump, quien busca maximizar las posibilidades de su partido para mantener el control de la Cámara Baja en las próximas elecciones.

Proceso y próximas decisiones

Antes de que el nuevo mapa sea oficial, debe ser aprobado por el Senado de Texas y sancionado por el gobernador Greg Abbott. La decisión de aprobarlo se tomó tras una intensa campaña, que incluyó la huida de legisladores demócratas del estado para retrasar la votación, y la vigilancia policial constante tras su regreso para garantizar su asistencia a la sesión.

Este episodio en Texas podría motivar que en California, el Legislativo controlado por los demócratas también apruebe su propio rediseño de distritos, que busca crear cinco zonas con mayoría demócrata. Sin embargo, esa modificación requerirá la aprobación de los votantes en noviembre, en una consulta popular.

Mientras tanto, los demócratas han anunciado que interpondrán demandas contra el nuevo mapa de Texas, alegando que los republicanos aprovecharon la oportunidad para hacer cambios políticos sin atender otras prioridades, como la respuesta a las recientes inundaciones que azotaron el estado.

Otros estados, tanto republicanos como demócratas, también están en proceso de rediseñar sus distritos, incluyendo Ohio, Florida, Indiana, Misisipi, Maryland e Illinois. A nivel nacional, los republicanos lograron mantener el control de la Cámara en 2024 con una diferencia de solo tres escaños, en un contexto donde las dinámicas políticas y la aprobación de Trump influyen en los resultados.