¡Alerta en Chicago! Soldados de la Guardia Nacional de Texas despliegan en centro de detención de ICE, desatando tensiones migratorias

En la madrugada del jueves, tres camiones con un total de 45 miembros de la Guardia Nacional de Texas llegaron al centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Broadview, Chicago, según informaron las autoridades locales. Los efectivos militares permanecieron en sus vehículos estacionados en la parte trasera del recinto, muchos de ellos pernoctando allí, para facilitar su ingreso en horas matutinas.

Imágenes difundidas por medios locales muestran a los soldados portando el parche de la Guardia Nacional de Texas, equipados con escudos antidisturbios y moviendo sacos de lona y otros implementos militares. La administración de Broadview emitió un comunicado en el que afirmó: “Los dejamos dormir tranquilos. Esperamos que en los próximos días sean tratados con la misma cortesía que los residentes de Broadview, quienes también merecen un buen descanso nocturno”.

Este jueves por la mañana, las inmediaciones del centro de detención permanecieron en calma, con solo una decena de manifestantes pacíficos congregados en las puertas del recinto. En días anteriores, las protestas y enfrentamientos con agentes federales se intensificaron, llegando a usar pelotas de goma y gases lacrimógenos contra los manifestantes.

Estos 45 efectivos de la Guardia Nacional de Texas forman parte de un contingente total de 200 soldados enviados por la Administración Trump, que llegaron el martes pasado para reforzar a otros 300 militares de la Guardia Nacional de Illinois. El resto de las tropas permanece en un centro de entrenamiento en Elwood, Illinois, a aproximadamente una hora en auto de Chicago.

El Comando Norte de EE.UU. confirmó que la misión principal de estos soldados es brindar apoyo en las operaciones de vigilancia y seguridad durante las redadas migratorias, que se han intensificado en el último mes bajo la operación Midway Blitz. Hasta ahora, estas acciones han resultado en decenas de detenciones, principalmente de origen latinoamericano.

La institución militar aclaró que la presencia de las tropas se extenderá por 60 días, durante los cuales también protegerán instalaciones federales, pero enfatizó que en ningún momento asumirán funciones policiales. Por su parte, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, afirmó que estos soldados constituyen un “grupo de élite” con experiencia en operaciones migratorias en la frontera sur, y que su despliegue en Illinois responde a la necesidad de fortalecer las acciones en otros estados, a pesar de que estos últimos son gobernados por el Partido Demócrata.

Este despliegue militar en Illinois ha generado controversia, pero las autoridades aseguran que su labor se limita a tareas de apoyo y seguridad, sin involucrarse en labores policiales. La operación forma parte de la estrategia federal para endurecer las políticas migratorias en los Estados Unidos en medio de un contexto de creciente tensión y debate sobre las políticas migratorias y de seguridad en el país.