¡Alerta en El Rodeo I: Amenazas de desaparición y tortura a presos políticos y extranjeros por órdenes del régimen!

Incrementa la amenaza y el deterioro en la cárcel El Rodeo I

Las intimidaciones contra los presos y sus familiares en la cárcel El Rodeo I se han intensificado en los últimos meses. Funcionarios penitenciarios han aumentado las amenazas, asegurando que, en caso de una intervención extranjera, «los desaparecerán». Además, los internos son sometidos a una campaña de mensajes de propaganda oficialista, donde se les colocan transmisiones constantes de Nicolás Maduro, Diosdado Cabello, María Corina Machado y Donald Trump, con el fin de manipular su percepción y mantener el control.

En esta prisión de máxima seguridad, se concentran internos de diversas nacionalidades, muchos de los cuales están en un ala separada de los presos venezolanos. La separación busca evitar cualquier interacción entre los detenidos, en un intento por controlar la información y las posibles protestas. La mayoría de los presos venezolanos son considerados presos políticos o individuos que han caído en desgracia con el régimen, y su situación se ha agravado debido a las amenazas y condiciones infames en las que se encuentran.

Condiciones inhumanas y amenazas constantes

Numerosos familiares de los presos han reportado llamadas de supuestos funcionarios policiales, en las que se les advierte que no deben hacer publicaciones en redes sociales ni denunciar la situación. La estrategia parece orientada a silenciar cualquier denuncia pública. Paralelamente, el deterioro físico de los internos ha sido alarmante, alimentado por la escasez de alimentos y las condiciones precarias en las que se les suministran las raciones.

Los presos sufren pérdida de peso, ojeras pronunciadas, problemas en la piel y un deterioro general en su salud mental. La justificación oficial es que hay un recorte presupuestario que limita la cantidad de comida, pero las familias aseguran que no permiten que les lleven alimentos, lo que muchos consideran una forma de tortura. La restricción también incluye la prohibición de que los familiares puedan visitar o llevarles comida, agravando aún más su situación.

## Estado de salud y condiciones de detención

La situación en la cárcel es desesperante. Una mujer relata que ha solicitado en varias ocasiones poder llevar comida a su hijo, quien está muy débil, pero siempre recibe la misma respuesta: está prohibido. La falta de recursos y las fallas en la cocina han provocado que las porciones de comida sean mínimas, y en algunos casos, se han suspendido por completo las preparaciones internas, obligando a los internos a sobrevivir con raciones escasas proporcionadas desde el exterior.

El deterioro físico de los presos es evidente, y las condiciones en las que deben jugar básquet en el patio, sin el equipo adecuado, han provocado lesiones en algunos internos. Además, la presencia de presos comunes, incluyendo a pandilleros y otros considerados enemigos del régimen, ha complicado aún más la situación, creando un ambiente aún más hostil y peligroso.

Desinformación y desapariciones

Otra preocupación importante es la desaparición de algunos internos. Familiares denuncian que muchos detenidos han sido trasladados sin información sobre su paradero, y cuando consultan a las autoridades del penal, reciben negaciones. Esta práctica genera una gran incertidumbre y temor entre sus seres queridos.

El responsable del penal, Julio García Zerpa, ha sido señalado por familiares y expertos como la figura que dirige estas políticas severas y en ocasiones inhumanas. La situación en El Rodeo I refleja una realidad dura para los internos y sus familias, marcada por amenazas, condiciones inhumanas y una estrategia de control que busca silenciar toda forma de resistencia o denuncia pública.