¡Aunque el USDA revela excedentes en maíz y trigo, China mantiene su dominio y soja estadounidense enfrenta un futuro incierto!

Informe WASDE del USDA genera incertidumbre en los mercados agrícolas

El más reciente informe WASDE del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha provocado más interrogantes que certezas en el sector agrícola. En particular, las cifras relacionadas con el maíz y el trigo fueron interpretadas como negativas, ya que mostraron niveles de inventario superiores a las expectativas. Por otro lado, las reservas de soja registraron una disminución mayor a la prevista.

Estos datos, sin embargo, no lograron revertir la tendencia a la baja en los precios de los granos. La atención del mercado volvió a centrarse en China, cuyo comportamiento en las compras y reservas continúa siendo clave para los precios internacionales.

Ventas de soja a China y situación de sus reservas

Las llamadas ventas «flash», que superan las 100.000 toneladas, evidencian que los envíos de soja a China han sido limitados. En total, las exportaciones a ese país no alcanzaron las 1,5 millones de toneladas, con solamente 300.000 destinadas a China. Un dato relevante es que las reservas de soja en China se mantienen en niveles elevados, aunque menos que en años anteriores. Aunque el país ha reducido aranceles recientemente, el grano estadounidense sigue siendo menos competitivo que el brasileño debido a su precio más alto.

Además, el fortalecimiento del acuerdo comercial entre China y Brasil para el intercambio de granos podría reducir aún más la participación de Estados Unidos en ese mercado estratégico, lo que genera incertidumbre para los exportadores estadounidenses.

Perspectivas globales para maíz, trigo y la relación China-EE. UU.

A nivel mundial, el maíz atraviesa un momento favorable para Estados Unidos, con exportaciones que mantienen su dinamismo y stocks internacionales en descenso. La caída en las reservas chinas, aunque aún considerables, se ha reducido en comparación con años anteriores, afectando la oferta global.

En Brasil, las estimaciones de CONAB apuntan a una menor cosecha de maíz respecto a la campaña pasada, acompañada de un aumento en el consumo interno. La autorización de China para comprar subproductos como DDG y sorgo brasileño añade competencia en el mercado.

Respecto al trigo, la demanda global continúa firme, especialmente en países como Egipto y Argelia. Sin embargo, la oferta sigue siendo abundante. El USDA prevé un aumento en la producción en los principales países exportadores, aunque advierte que Rusia podría registrar una caída en la próxima cosecha debido a la reducción en el área cultivada.

Avances en las negociaciones entre China y Estados Unidos

Las conversaciones económicas y comerciales entre China y EE. UU., realizadas a finales de octubre, mostraron signos positivos, según declaraciones oficiales. Uno de los temas principales fue el control de las exportaciones, un asunto sensible en la relación bilateral.

El secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, comentó que China podría retomar compras masivas de soja de EE. UU. en los próximos años. Además, se evalúa una posible postergación de un año en la implementación de un nuevo sistema de licencias para exportar tierras raras, mientras Beijing revisa su política al respecto.

Es importante recordar que, en octubre, China endureció las restricciones comerciales sobre estos minerales estratégicos. En respuesta, el gobierno de EE. UU. advirtió que, si esas restricciones permanecen, aplicaría un incremento del 100% en los aranceles a las importaciones chinas a partir del 1 de noviembre.

Situación en Argentina y perspectivas para la región

En Argentina, la siembra de soja avanza con ritmo firme, aunque algunos retrasos debido a las recientes lluvias. A pesar de ello, aún hay tiempo para completar la siembra en la ventana óptima. Las ventas de grano continúan activas, impulsadas por la demanda de harina de soja y los buenos márgenes en la industria durante el año.

Por otro lado, el maíz también presenta una tendencia positiva, con precios elevados que motivan nuevas operaciones. Sin embargo, la rapidez en la comercialización genera cautela entre los productores, quienes están evaluando cuidadosamente sus próximas decisiones. Las proyecciones indican una producción abundante en la próxima campaña agrícola.

La cosecha de trigo, aunque con avances intermitentes por las lluvias, podría aliviar la presión en el mercado. La llegada de buques para carga, si bien puede generar algunas demoras logísticas, favorece la estabilización de los precios y la oferta.