Banksy condena la justicia en Londres: su provocativo mural es borrado tras sentencia judicial

La polémica obra de Banksy desaparece del edificio judicial en Londres

El reconocido artista callejero Banksy volvió a generar controversia con su último mural, que fue eliminado este miércoles en Londres. La obra, que mostraba a un juez golpeando a un manifestante, fue retirada por orden de las autoridades del Tribunal Real de Justicia, que consideran que el mural no tiene cabida en un edificio tan importante desde el punto histórico.

A diferencia de otras piezas provocativas del mismo artista, que a menudo terminan en colecciones privadas o subastas millonarias, este mural fue borrado rápidamente después de su aparición. La obra, realizada con la técnica de stencil o plantilla, se exhibía en la pared del icónico edificio neogótico, que tiene más de 140 años de antigüedad.

Detalles sobre la obra y la respuesta oficial

El mural retrataba a un manifestante tendido en el suelo, sosteniendo una pancarta ensangrentada, mientras un juez con peluca tradicional y toga negra lo golpeaba con un martillo. La imagen fue publicada por Banksy en su cuenta de Instagram, como es habitual para autenticar sus trabajos. Sin embargo, los administradores del tribunal consideraron que la pieza debía ser retirada para preservar el carácter histórico del edificio.

La Policía Metropolitana informó que investiga la obra como un posible acto de daño criminal. Hasta el momento, no ha habido declaraciones oficiales del portavoz de Banksy, quien no respondió de inmediato a solicitudes de comentario. La obra fue rápidamente cubierta tras su aparición, en un intento por las autoridades de mantener la integridad del edificio.

Contexto político y activismo en torno a la mural

Este mural no hacía referencia explícita a un evento específico, pero fue interpretado por algunos activistas como un comentario sobre la reciente prohibición del grupo Palestine Action en el Reino Unido. Dicha organización, que lucha contra la ocupación en Palestina, fue catalogada como organización terrorista por el gobierno británico, lo que provocó una serie de protestas en Londres, con cerca de 900 arrestos en una manifestación el pasado sábado.

El edificio que alberga la obra es sede de la Corte de Apelaciones y el Tribunal Superior. Estas instituciones han intervenido en los esfuerzos de Palestine Action por apelar la decisión gubernamental. Aunque inicialmente la solicitud de la organización fue rechazada, un juez del Tribunal Superior permitió que el proceso siguiera en marcha, aunque el gobierno sigue impugnando esa decisión.

Con esta acción, las autoridades buscan proteger el patrimonio histórico del edificio, mientras que Banksy continúa siendo un símbolo de crítica social y política a través de su arte.

Fuente: AP

[Fotos: Danny Halpin/PA vía AP]