Bogotá emite un bono verde histórico por US$600 millones para impulsar movilidad eléctrica y transporte moderno

Una ciudad latinoamericana que lidera el cambio sostenible

Una capital de América Latina ha emergido como uno de los centros más dinámicos del continente. Se trata de una ciudad que no espera al futuro, sino que lo proyecta desde hoy. En sus calles, la innovación tecnológica, la sostenibilidad y una visión urbana enfocada en afrontar desafíos globales desde las comunidades locales se entrelazan.

Más allá de ser una simple metrópoli, esta urbe funciona como un laboratorio vivo donde ocurren avances en movilidad limpia, finanzas verdes, cultura y participación ciudadana. Aunque sus transformaciones aún son discretas, ya comienza a consolidarse como uno de los centros tecnológicos sostenibles de mayor calidad a nivel mundial.

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El destino verde de Colombia

Bogotá dejó de ser una ciudad que simplemente se adapta a los cambios para convertirse en un verdadero laboratorio urbano. En los últimos años, ha consolidado un modelo que combina sostenibilidad, tecnología e inclusión social, atrayendo la atención de gobiernos, organismos multilaterales e inversores internacionales. Su agenda verde incluye proyectos que integran innovación financiera, movilidad limpia y cultura, posicionándola como un referente en desarrollo urbano sostenible en América del Sur.

Bonos verdes impulsan proyectos sostenibles

Durante 2025, Bogotá se convirtió en la primera ciudad de Sudamérica en emitir un bono verde internacional destinado exclusivamente a financiar iniciativas sostenibles. La operación, por un monto de US$600 millones, contó con el respaldo del Banco Mundial, la Corporación Andina de Fomento (CAF) y la Unión Europea, y atrajo el interés de numerosos inversores internacionales.

Los fondos recaudados se canalizan a proyectos que buscan transformar la movilidad urbana, como la expansión del Metro de Bogotá, cables aéreos ligados al transporte público y corredores para transporte masivo. Estas acciones permitirán reducir unas 160.000 toneladas de emisiones de CO₂ anualmente, mejorar los tiempos de desplazamiento—especialmente en barrios vulnerables— y reforzar la resiliencia de la ciudad frente al cambio climático.

Tecnología y cultura, pilares del desarrollo

La visión de Bogotá no se limita a la infraestructura. La ciudad ha incorporado la innovación tecnológica y cultural en su estrategia de crecimiento. Un ejemplo es “La Rolita”, un sistema de autobuses eléctricos que, además de reducir la huella de carbono, promueve la igualdad de género, fomentando la participación activa de mujeres en su operación.

En el escenario internacional, Bogotá ha ganado protagonismo. En 2025, fue invitada por primera vez a la World Cities Culture Summit, donde presentó iniciativas relacionadas con la innovación cultural y el uso ético de la inteligencia artificial en la formulación de políticas públicas con participación ciudadana. Además, impulsa el talento local a través de eventos y convocatorias que apoyan proyectos con impacto social y ambiental.

Resumen de los aspectos más destacados

• Laboratorio urbano: La ciudad adopta un modelo que anticipa y responde a desafíos globales, integrando sostenibilidad, tecnología e inclusión en su planificación.
• Bonos verdes: En 2025, fue pionera en emitir un bono internacional por US$600 millones para financiar proyectos sostenibles con respaldo de organismos internacionales.
• Movilidad limpia: Los fondos se destinan a obras como el Metro, cables aéreos y corredores de transporte masivo, reduciendo emisiones y mejorando el servicio en zonas vulnerables.
• Innovación y cultura: La implementación de sistemas como “La Rolita” y la participación en foros globales reflejan su apuesta por la innovación tecnológica y cultural.
• Reconocimiento global: La ciudad ha capturado la atención de actores internacionales y en 2025 participó en la primera edición de la World Cities Culture Summit, consolidándose como referente en desarrollo urbano sostenible.