Logo

Bolivia, tras 20 años de izquierda, se acerca a un cambio hacia la derecha

Escrito por radioondapopular
octubre 19, 2025
Bolivia, tras 20 años de izquierda, se acerca a un cambio hacia la derecha






Crisis política y económica en Bolivia: elecciones y desafíos




Votante muestra su boleta durante las elecciones en La Paz
Imagen de archivo: Una votante muestra su boleta durante la primera vuelta de las elecciones generales en La Paz, Bolivia, el domingo 17 de agosto de 2025 (AP Foto/Natacha Pisarenko)

Bolivia enfrenta una encrucijada política y económica tras las elecciones presidenciales

El acto de campaña de Rodrigo Paz en El Alto

Cuando Rodrigo Paz concluyó su último acto de campaña en El Alto, la extensa ciudad ubicada en una meseta que domina la capital boliviana, La Paz, una multitud se congregaba bajo el sol abrasador. Los asistentes, preparados con cajas de cerveza y un picnic a base de papas, mostraban entusiasmo y esperanza. Un hombre bien alimentado, con voz enérgica, exclamó: “Los pueblos indígenas somos mayoría y volveremos a ganar”, lo que provocó que todos los presentes entonaran el grito de victoria aimara: “¡Jallalla!».

El fin de una era de apoyo al MAS y el escenario electoral

Durante más de 20 años, los habitantes de las tierras altas bolivianas han respaldado al Movimiento al Socialismo (MAS). Sin embargo, esa tendencia parece estar llegando a su fin. En las elecciones de agosto, la primera vuelta presidencial, los votantes optaron por Rodrigo Paz, un senador de orientación centrista, quien obtuvo un apoyo significativo y se enfrentará a Jorge Quiroga, ex presidente conservador, en la segunda vuelta prevista para el 19 de octubre.

Por su parte, el MAS recibió un porcentaje de votos tan bajo que casi pierde su estatus legal. Este escenario apunta a que Bolivia podría dar un giro hacia la derecha y avanzar en la liberalización de su economía. Sin embargo, aún no está claro cuánto cambiará el país ni cómo podrá enfrentarse a los problemas económicos que dejó la gestión del MAS.

La crisis económica en Bolivia

Desde principios de 2023, el banco central del país se encontró prácticamente sin reservas en dólares. Los bolivianos enfrentan restricciones para acceder a sus ahorros en divisas estadounidenses, que en el mercado negro se venden a casi el doble del tipo de cambio oficial. El gobierno ha recurrido a vender oro para pagar las importaciones de combustible, pero la escasez de recursos continúa. La inflación, en tanto, alcanzó el 18% en el año hasta septiembre, y la deuda pública ha llegado al 92% del PIB tras 11 años consecutivos de déficit fiscal.

El deterioro económico ha sido evidente, con una economía que se encuentra en crisis y que requiere medidas urgentes para estabilizarse.

Las luchas internas en el liderazgo político

En medio del caos económico, Luis Arce, actual presidente, y Evo Morales, ex presidente y líder carismático de izquierda que gobernó Bolivia desde 2006 hasta 2019, lucharon por liderar el MAS en estas elecciones. Cuando las encuestas mostraron que solo el 2% de los votantes tenían intención de apoyar a Arce, este decidió retirar su candidatura. Además, una sentencia judicial impidió que Morales se presentara, por lo que pidió a sus seguidores que invalidaran sus papeletas, con un respaldo cercano al 20% en esa acción.

El ascenso de Rodrigo Paz y su propuesta política

En contraste, muchos votantes respaldaron a Rodrigo Paz, quien pasó de menos del 10% en las encuestas a obtener el 32% de los votos en la primera vuelta. Paz, de 58 años y hijo del ex presidente Jaime Paz Zamora, lleva décadas en la política. Su compañero de fórmula, Edman Lara, un outsider que ganó popularidad tras denunciar casos de corrupción en TikTok, se convirtió en un símbolo de cambio. Juntos prometieron una política distinta a la del MAS y a la de la oposición tradicional, abogando por un “capitalismo para todos”. Su propuesta buscaba mantener los programas sociales del MAS, liberalizar la economía y luchar contra la corrupción, logrando un apoyo cercano al 50% en las tierras altas.

El perfil del candidato opositor, Jorge Quiroga

Jorge Quiroga, de 65 años, representa a la oposición establecida. Ex vicepresidente y brevemente presidente en 2001 tras la renuncia de su antecesor, esta es su cuarta candidatura presidencial. Quiroga califica los “20 años perdidos” del MAS y promete un cambio radical en la dirección del país. Su apoyo se concentra en Santa Cruz, el departamento más poblado y económicamente activo, que ha sido tradicionalmente opositor al MAS.

Perspectivas y desafíos para la segunda vuelta

Las encuestas prevén a Quiroga con una ventaja de entre cuatro y ocho puntos sobre Paz, aunque sufiere una cierta incertidumbre, ya que en la primera vuelta no lograron predecir con precisión el apoyo a Paz. Como señala el sociólogo aimara Pablo Mamani, en El Alto “se cree ampliamente que las encuestas están manipuladas a favor de Quiroga”.

Los retos económicos tras la elección

Independientemente del resultado, el próximo gobierno tendrá que afrontar la grave crisis económica. La prioridad será obtener dólares y garantizar el flujo de importaciones de combustible, ya que sin ello, la estabilidad del país podría estar en peligro. Quiroga ha anunciado que buscará un préstamo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras que Paz asegura que no será necesario si logra reducir la corrupción y recuperar la confianza de la población, incentivando a la gente a retirar sus ahorros en dólares.

Ambos candidatos ya han iniciado conversaciones en Washington para definir las medidas a tomar. Sin embargo, las reformas necesarias incluyen cambios en los subsidios al combustible —que en 2024 costaron aproximadamente 2.000 millones de dólares, casi el 4% del PIB— y en la reducción del déficit fiscal, que supera el 10% del PIB.

Para ello, será fundamental impulsar las exportaciones agroindustriales y atraer inversión extranjera en los sectores minero, petrolero y gasístico. Además, será necesario reconstruir un sistema judicial independiente tras años de abusos por parte del MAS y, en algún momento, flexibilizar el tipo de cambio fijo para estabilizar la economía.

¿Qué tolerarán los bolivianos?

En 2010, cuando Morales intentó eliminar los subsidios a los combustibles, las protestas masivas le obligaron a dar marcha atrás. La población parece comprender ahora la necesidad de cambios profundos. Sin embargo, el próximo presidente enfrentará un dilema: actuar con demasiada lentitud podría desperdiciar su capital político mientras la economía continúa deteriorándose; por otro lado, una reforma rápida y drástica podría generar resistencia social.


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *