Logo

Día de la Mujer Indígena: homenaje a Bartolina Sisa, heroína aymara asesinada

Escrito por radioondapopular
septiembre 5, 2025
Día de la Mujer Indígena: homenaje a Bartolina Sisa, heroína aymara asesinada

## La brutal ejecución de Bartolina Sisa y su legado de resistencia

El cuerpo de Bartolina Sisa fue objeto de una humillación extrema: fue atada a la cola de un caballo, arrastrada por las calles de La Paz y posteriormente descuartizada. Esta cruel escena sirvió como una advertencia para quienes se atrevieran a desafiar el dominio colonial. La ejecución tuvo lugar el 5 de septiembre de 1782, en un momento en que el virreinato del Perú confirmaba la muerte de una de las líderes indígenas más destacadas en la resistencia anticolonial del Alto Perú.

Sisa, de origen aymara, guerrera y estratega, se convirtió en el símbolo de una lucha colectiva por la libertad que enfrentó al Imperio español desde las entrañas del continente. Su sacrificio quedó marcado en la historia como un acto de valentía frente a la opresión, y su figura continúa inspirando la resistencia de los pueblos originarios.

## La figura de Bartolina Sisa y su importancia histórica

Dos siglos después de su muerte, su nombre sigue resonando como un grito de dignidad y resistencia. En 1983, organizaciones indígenas de toda América se reunieron en Tihuanacu, Bolivia, y decidieron declarar el 5 de septiembre como el Día Internacional de la Mujer Indígena. Esta conmemoración no fue solo un acto simbólico, sino una respuesta política ante siglos de silencio y olvido.

El objetivo fue honrar a las miles de mujeres como Bartolina Sisa, que lideraron rebeliones, sostuvieron comunidades y resistieron el despojo. Además, lucharon por mantener viva la memoria ancestral, a pesar de haber sido sistemáticamente invisibilizadas por la historia oficial. La fecha busca recordar que la lucha por los derechos y la cultura indígena sigue vigente.

## Vida y contexto de Bartolina Sisa

Aunque en los manuales escolares suele reducirse a un breve párrafo, la historia de Bartolina Sisa es una epopeya de resistencia anticolonial. Nació a finales de agosto de 1750 en la región de Caracato, en lo que hoy es el departamento de La Paz, en el Alto Perú. Hija de comerciantes de coca y textiles, creció entre tejidos de bayeta y en los caminos de los Yungas, recorriendo pueblos, minas y mercados.

Desde su infancia, fue testigo del desprecio hacia su cultura y de la destrucción de la estructura comunitaria indígena a manos del sistema de encomiendas. La represión no solo se manifestaba en castigos físicos o encarcelamientos, sino en la imposición de una religión, una lengua y una visión del mundo ajenas a su pueblo. Para muchos, esa violencia generó resignación, pero para ella fue la semilla que encendió un fuego interior.

A los 19 años, ya era una mujer independiente y consciente de las brutales formas de opresión que sufría su pueblo, incluyendo impuestos desmedidos, trabajo forzado, saqueo de recursos y violencia sistemática contra sus identidades culturales.

## La unión con Túpac Katari y su liderazgo

Durante sus recorridos, conoció a Julián Apaza, un joven aimara que también provenía del comercio de coca y que había sobrevivido a las minas de mita. Más tarde, sería conocido como Túpac Katari. En 1772, contrajeron matrimonio y tuvieron cuatro hijos, aunque su relación fue compleja y marcada por separaciones. Bartolina relató que permanecieron distanciados durante mucho tiempo y que solo se reencontraron cuando comenzó la rebelión contra el dominio colonial.

A pesar de las dificultades personales, su vínculo permaneció fuerte, ya que compartían la convicción de que el orden colonial debía ser combatido con todos los recursos disponibles. La lucha de Bartolina fue mucho más que la de la esposa de un líder indígena; ella fue una jefa militar, estratega y líder en su propio derecho.

## El liderazgo de Bartolina Sisa en la resistencia

Bartolina Sisa demostró ser una mujer de carácter, capaz de disparar un fusil y comandar tropas. Su liderazgo le valió el reconocimiento no solo como una líder indígena, sino también con el título de “Virreina del Inca”, en reconocimiento a su papel en la organización de la resistencia. Ella estableció campamentos en lugares como El Alto, Chacaltaya, Killi Killi, Pampahasi y Potopoto, articulando la logística de la rebelión y ganándose el respeto y obediencia de miles de seguidores.

Su liderazgo no fue de respaldo, sino de comando activo. La combinación de su identidad indígena y su condición de mujer hicieron que su figura fuera doblemente disruptiva para las estructuras coloniales y patriarcales de la época. Su historia sigue siendo un símbolo de resistencia y lucha por los derechos de los pueblos originarios en América Latina.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *