Dictadura cubana: métodos de tortura como “cama turca”, “bicicleta” y “shakiras”

Crisis humanitaria en el sistema penitenciario cubano, revela informe del Centro de Documentación de Prisiones Cubanas

El sistema penitenciario en Cuba atraviesa una grave crisis humanitaria, según revela el informe anual elaborado por el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas (CDPC). El documento documentó un total de 1,858 incidentes relacionados con personas privadas de libertad entre marzo de 2024 y el mismo mes de 2025.

Violaciones de derechos humanos y muertes bajo custodia

De estos incidentes, 1,330 corresponden a violaciones de derechos humanos, evidenciando un patrón sistemático de abusos que afectan todos los aspectos de la vida en prisión, desde las condiciones materiales básicas hasta el derecho fundamental a la vida. El estudio, basado en la verificación de casos en un contexto de total opacidad informativa, identificó además 60 muertes bajo custodia estatal.

De estas muertes, 47 están relacionadas con problemas de salud física y mental o la falta de atención médica oportuna, mientras que siete resultaron de violencia física directa. La ONG destacó que “ninguna de estas pérdidas de vidas ha sido objeto de investigación independiente e imparcial, perpetuando un patrón de impunidad que facilita la repetición de estos hechos”.

Principales tipos de violaciones y condiciones en las cárceles

Las violaciones más frecuentes incluyen 1,176 incidentes de hostigamiento y represión, 555 denuncias por problemas de salud general, 454 casos de negación de atención médica, 341 relacionados con condiciones inadecuadas de vida y 260 referidos a deficiencias alimentarias. Estas cifras afectan a 548 víctimas individuales (508 hombres y 40 mujeres), además de 244 denuncias colectivas que reportan violaciones que afectan a toda la población penal en diversos centros carcelarios.

Prácticas de tortura y tratos crueles

El informe detalla las prácticas de tortura y tratos crueles aplicados por las autoridades cubanas en sus cárceles, destacando dos métodos: la “cama turca”, que consiste en la inmovilización en posición fetal durante días, y “la bicicleta”, que obliga a caminar encorvado con las manos esposadas en la espalda.

También se documentaron casos extremos de encierros de hasta tres años en celdas de castigo y el uso prolongado de esposas tipo “shakiras”, cadenas que inmovilizan manos y pies, dificultando funciones básicas como comer o asearse.

Condiciones inhumanas y negligencia médica

Las condiciones materiales en las cárceles cubanas son descritas como infrahumanas: desnutrición masiva, suministro de agua contaminada, hacinamiento que obliga a dormir en el suelo y filtraciones permanentes en infraestructuras deterioradas.

La negligencia médica es una constante. El informe relata la casi total ausencia de medicamentos básicos y la negación deliberada de atención, incluso en casos críticos. Un ejemplo ilustrativo es el de una reclusa que se extrajo sus propios cordales (muelas de juicio) sin anestesia ni instrumental adecuado, ante la negativa reiterada de las autoridades a brindarle asistencia.

Trabajo forzoso y represión adicional a presos políticos

Otra práctica extendida en las cárceles cubanas es el trabajo forzoso. Las personas reclusas deben cumplir jornadas laborales sin remuneración o con pagos muy inferiores a los establecidos por la ley, bajo amenazas de perder beneficios penitenciarios.

La situación es particularmente grave para quienes están encarcelados por motivos políticos, al menos 329 víctimas identificadas. Estos presos enfrentan niveles adicionales de represión, aislamiento sistemático y restricciones arbitrarias en sus comunicaciones con sus familiares y redes de apoyo.

Imágenes y testimonios

El informe del CDPC evidencia un panorama alarmante que requiere atención internacional urgente. La situación en las cárceles cubanas refleja una grave vulneración de derechos humanos que continúa sin ser abordada de manera efectiva por las autoridades del país.