Edificio de Blackstone, NFL y consulado irlandés, escenario del ataque

Un violento tiroteo ocurrido en la noche del lunes en Manhattan dejó cuatro personas fallecidas, incluido un oficial de policía fuera de servicio, en uno de los edificios más emblemáticos del centro financiero de Nueva York. El incidente tuvo lugar en la torre de 345 Park Avenue, una estructura de 44 pisos y aproximadamente 1,9 millones de pies cuadrados, propiedad de Rudin Management, una de las firmas inmobiliarias con mayor trayectoria en la ciudad.

Este rascacielos, situado entre las calles 51 y 52 y en la intersección de Park Avenue y Lexington Avenue, alberga a varias instituciones de gran influencia. Entre sus principales inquilinos se encuentran Blackstone, una de las mayores firmas de inversión a nivel mundial; la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), que allí tiene su sede central; la firma de auditoría KPMG; el fondo alemán Deutsche Bank; además del consulado general de Irlanda y la propia Rudin Management. La torre, que ocupa toda una manzana y cuenta con un código postal propio, fue construida en los años 60 y ha sido un hito en la expansión comercial de Midtown Manhattan desde entonces.

El agresor, Shane Tamura, de 27 años, ingresó al edificio alrededor de las 6:30 p.m. armado con un rifle AR-15 semiautomático. Tras abrir fuego en el vestíbulo, se desplazó a los pisos superiores, donde finalmente se quitó la vida en una oficina del piso 33. La policía confirmó que, además de las víctimas mortales, hay varias personas heridas, entre ellas un empleado de la NFL, que fue trasladado en estado grave a un hospital. Según informes internos de la liga, el herido se encuentra estable y recibiendo atención.

El comisionado de la NFL, Roger Goodell, expresó públicamente que «todos los empleados del edificio han sido localizados y están a salvo», destacando la rápida actuación de las fuerzas de seguridad y agradeciendo a los oficiales, especialmente a Didarul Islam, quien, aunque fuera de servicio, intervino durante el ataque. Como medida de precaución, se reforzaron los controles de seguridad en la zona y se intensificaron las patrullas en los días siguientes.

Este incidente ha puesto de manifiesto las vulnerabilidades en edificios de alto perfil que, pese a contar con vigilancia privada y presencia policial, no logran impedir la entrada de armas peligrosas. Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si Tamura tenía alguna relación con el edificio o sus ocupantes, y continúan investigando sus motivos.

El edificio de 345 Park Avenue no solo destaca por su tamaño y prestigio, sino también por su ubicación en una de las áreas más concurridas y densamente ocupadas del distrito financiero. A su alrededor se encuentran otros íconos arquitectónicos, como el Seagram Building y el Sotheby’s Institute of Art, en un enclave que concentra firmas financieras, estudios jurídicos y sedes diplomáticas, consolidando su importancia en el skyline de Nueva York.