EEUU sanciona grupo por petróleo y lavado de dinero a hutíes

Estados Unidos anunció este martes la imposición de nuevas sanciones contra una red vinculada a los rebeldes hutíes en Yemen, acusada de facilitar la importación de petróleo y de realizar operaciones de lavado de dinero. La medida afecta a dos individuos y cinco entidades, en un esfuerzo por desmantelar las redes financieras que apoyan a los insurgentes.

Según el Departamento del Tesoro, los hutíes, respaldados por empresas relacionadas con Irán, han logrado acceder al sistema financiero internacional, generando ingresos que alcanzan varios cientos de millones de dólares anualmente. Estos fondos se canalizan a través de redes como la sancionada, que permite a los rebeldes adquirir petróleo y venderlo en las zonas bajo su control, manipulando los precios y obteniendo beneficios económicos.

Washington señala que los hutíes colaboran con compañías privadas que suministran productos petrolíferos. En su informe, el Departamento del Tesoro explicó que, una vez en Yemen, los rebeldes controlan los precios de venta, aplicando sobrecostos considerables que afectan a la población local.

Entre los sancionados se encuentra Mohamed Al-Sunaydar, identificado como líder de una red que opera mediante tres empresas petroleras en Yemen y los Emiratos Árabes Unidos. Las autoridades estadounidenses indicaron que Al-Sunaydar ha sido responsable de coordinar envíos de petróleo iraní, valorados en aproximadamente 12 millones de dólares, desde el puerto de Ras Isa, en Yemen.

Además, fue sancionado Yahya Mohamed Al Wazir, acusado de gestionar la captación y el lavado de fondos para los hutíes. La lista también incluye a la casa comercial Al-Saida, en Saná, y a la cementera Amran, en la región montañosa de Saada, ambas implicadas en actividades de blanqueo de dinero.

Estas sanciones se suman a la designación de los hutíes —conocidos oficialmente como Ansarallah— como organización terrorista por Estados Unidos, en febrero de 2024. En marzo de 2025, Washington reforzó esta clasificación, incluyendo al grupo como una Organización Terrorista Extranjera bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad.

Este anuncio coincide con un momento de alta tensión en la región, en medio del incremento de los ataques de los hutíes en el Mar Rojo, en solidaridad con Gaza tras la ofensiva israelí del 7 de octubre de 2023. El puerto de Eilat, en Israel, ha experimentado una reducción del 90% en sus operaciones, según su director ejecutivo, Gideon Golber.

Respaldados por Irán, los hutíes han prometido continuar sus ataques contra buques marítimos, continuando la escalada en la región. Con estas sanciones, Estados Unidos busca desarticular la red financiera que respalda a los rebeldes y presionar aún más a Irán, en un contexto regional cada vez más inestable.