¿El oscuro secreto detrás del polémico episodio de La Familia Ingalls que aún horroriza a sus actores?

El episodio controvertido de «Pequeña Casa en la Pradera» que aún causa controversia

La serie clásica Pequeña Casa en la Pradera o La Familia Ingalls ha sido durante décadas símbolo de valores familiares y experiencias de la vida en Walnut Grove, Minnesota. Sin embargo, uno de sus capítulos ha permanecido en la memoria colectiva como uno de los más perturbadores y polémicos, incluso para los propios actores que lo interpretaron.

Un episodio que rompe con la tradición de la serie

Emitido en diciembre de 1976, el capítulo titulado “Bully Boys” relata la llegada de tres forasteros que desatan el caos en Walnut Grove a través de actos de violencia y acoso hacia las mujeres del pueblo. Este guion representó un cambio radical en el tono habitual de la serie, que generalmente promovía valores como la solidaridad, la esperanza y la comunidad.

Recientemente, en el Little House 50 Podcast, los actores Alison Arngrim (quien interpretaba a Nellie Oleson) y Dean Butler (que daba vida a Almanzo Wilder), junto con la presentadora Pamela Bob, recordaron con claridad aquella historia, calificándola como uno de los episodios más difíciles de aceptar tanto para el elenco como para los espectadores.

Escenas impactantes y rechazo por su crudeza

Arngrim, de 63 años, expresó su incomodidad al recordar la escena en la que los forasteros atacan a las mujeres del pueblo. “Les pegan a las mujeres, son cobardes y quieren atacar a las niñas”, afirmó, comparando a los agresores con personajes de películas de terror como La masacre de Texas (1974). La violencia mostrada en esa escena generó rechazo en la audiencia de la época.

Otra secuencia que causó revuelo fue la agresión a Caroline Ingalls, interpretada por Karen Grassle. En ella, Caroline es atacada por los hermanos Galenders cuando intenta vender huevos, en una escena que Dean Butler describió como “la más amenazante jamás filmada en la serie”. La escena fue especialmente impactante por la crudeza con la que se mostró la amenaza y el trauma de la protagonista.

El impacto y la controversia en la narrativa

La escena en la que Bubba, interpretado por Michael LeClair, golpea brutalmente a Mary Ingalls (Melissa Sue Anderson), quedó grabada en la memoria de los televidentes. Pamela Bob recordó esa secuencia con indignación: “Fue la escena más loca cuando le pega un puñetazo en la cara”. Para los actores, ese momento significó un quiebre en la narrativa, que hasta entonces se centraba en historias familiares positivas.

Además, Arngrim destacó la escena en la que Caroline es atacada por los hermanos Galenders, señalando que la interpretación de Grassle transmitió con precisión el trauma de una agresión, algo poco común en la televisión de aquellos años. La escena, denuncia, presenta un acto que en su momento fue considerado un asalto.

Reflexión final y legado del episodio

El elenco coincidió en que, aunque el episodio concluye con un desenlace positivo para los habitantes de Walnut Grove, su contenido sigue siendo impactante y reprobable. Arngrim, quien interpretaba a Nellie Oleson, criticó que su personaje mostrara una actitud permisiva ante la violencia, incluso intentando convertirse en la novia de Bubba a pesar de presenciar sus agresiones.

Para Dean Butler, la trama planteaba una pregunta incómoda: ¿Hasta qué punto están dispuestos a aceptar los habitantes de Walnut Grove la violencia y la injusticia? La respuesta a esa interrogante es la razón por la cual “Bully Boys” ha quedado en la memoria como una anomalía en la serie, un episodio que desafió los límites y provocó debate duradero sobre los contenidos televisivos y su impacto social.