Las relaciones entre Perú y las economías europeas en la actualidad se centran en mantener las inversiones —incluyendo los acuerdos G2G— y fortalecer la cooperación mutua. Esto ocurre en un contexto donde se resuelven controversias relacionadas con la resolución del contrato de Rutas de Lima y el cobro de una nueva tarifa en el Aeropuerto Jorge Chávez.

En el marco del VIII Foro de Economía Circular, el embajador de la Unión Europea en Perú, Jonathan Hatwell, conversó con Infobae Perú sobre la relación que mantienen ambos actores tras el cambio de gobierno en Perú, las expectativas en materia de infraestructura y los desafíos para el acceso de productos agropecuarios bajo la nueva regulación que entrará en vigor en 2026.

¿Cuál es el objetivo principal del VIII Foro de Economía Circular en Lima y qué papel espera desempeñar la Unión Europea?

La Unión Europea ha acompañado a Perú durante los últimos ocho años en su camino hacia la economía circular. Desde 2018, hemos organizado foros para compartir experiencias y movilizar a todos los actores involucrados. Este es el octavo encuentro y se ha consolidado como el espacio técnico y político más relevante del país, reuniendo a representantes del sector público, privado, academia y sociedad civil para avanzar en la adopción de este modelo.

La economía circular implica dejar atrás el modelo lineal de extraer, transformar, usar y desechar, y en su lugar, maximizar el ciclo de vida de los materiales mediante reparación, reutilización y recuperación. Apoyamos a Perú en esta transición, promoviendo el aprovechamiento eficiente de los recursos existentes, la reducción de la extracción de nuevos materiales y la limitación del uso de recursos finitos. Este acompañamiento se realiza a través de la cooperación, el foro y la colaboración en el ámbito comercial.

¿Qué impacto puede tener la economía circular en el crecimiento del país y qué experiencias europeas pueden sumarse?

Desde nuestra perspectiva, Perú está avanzando de manera significativa en la implementación de la economía circular, contando con planes claros y ambiciosos que, si se cumplen, podrían generar resultados destacables. En ese sentido, apoyamos la ejecución de la hoja de ruta nacional de economía circular al 2030.

De alcanzarse los objetivos propuestos, se estima que Perú podría reducir el uso de materiales en 75 millones de toneladas, incrementar su PBI en aproximadamente 14.000 millones de soles —equivalente a un 2,2% del PBI actual— y crear alrededor de 300.000 empleos verdes y sostenibles. Estos beneficios son parte de los programas y eventos que impulsamos, como el VIII Foro de Economía Circular.

¿La economía circular en Perú es una tendencia consolidada o aún está en etapa incipiente?

Desde nuestra visión, Perú está progresando de manera notable en materia de economía circular y cuenta con planes estratégicos claros y ambiciosos. Si estos se cumplen, los resultados serán significativos. Por ello, continuamos brindando nuestro apoyo y acompañamiento.

¿Cómo es la relación actual de la Unión Europea con Perú y en qué sectores se puede potenciar la inversión?

Para la Unión Europea, Perú representa un socio sumamente importante en la región. Compartimos valores en defensa del multilateralismo, el derecho internacional, la democracia y los derechos humanos. La relación económica entre ambos países es fuerte y se ha fortalecido desde la firma del Tratado de Libre Comercio en 2013.

Además, la UE es el segundo inversor en Perú, gracias a la estrategia Global Gateway, cuyo objetivo es desarrollar infraestructuras sostenibles en áreas como energía limpia, transporte, digitalización, agua y saneamiento. Consideramos que aún hay un potencial considerable para ampliar y profundizar esta colaboración.

¿Qué oportunidades existen para los inversores europeos en Perú, considerando el impulso del gobierno peruano a las Asociaciones Público-Privadas y los contratos G2G?

Existen diversas formas de inversión internacional, como G2G y APP. La elección de una u otra dependerá de cada proyecto y de la evaluación que realice el gobierno peruano para determinar qué esquema resulta más adecuado y atractivo para atraer inversión extranjera.

En la práctica, varias empresas europeas participan activamente en asociaciones público-privadas y también en esquemas G2G, con el apoyo de algunos estados europeos. Nuestro objetivo no es promover una fórmula específica, sino asegurar que la elección sea la más adecuada, que los procesos sean transparentes y que los inversores tengan la seguridad de que se cumplirán los acuerdos.

¿Cuál es la situación actual de las inversiones europeas en sectores clave de Perú, tras la salida de empresas como Enel y Telefónica?

No puedo hablar en nombre de cada empresa, pero para nosotros, Perú sigue siendo un destino y socio atractivo. Aunque algunas compañías, como Enel y Telefónica, han decidido retirarse, otras continúan confiando en el mercado peruano.

Por ejemplo, el nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, gestionado por Lima Airport Partners —en el que Fraport AG, con sede en Alemania, posee el 80%—, y el muelle norte del Terminal Multipropósito del Callao, operado por APM Terminals, una empresa holandesa. La participación de empresas europeas en proyectos de infraestructura y logística demuestra el interés continuo en el país.

Es fundamental contar con un marco jurídico estable y con seguridad jurídica para que las inversiones europeas puedan mantenerse y crecer en Perú.