Escándalo: Nicole Kidman y Keith Urban, pacto prenupcial con cláusula de 17 millones que obliga la sobriedad

Separación de Nicole Kidman y Keith Urban: un acuerdo prenupcial con cláusula de sobriedad en el centro del escándalo

El matrimonio de casi 19 años entre la reconocida actriz Nicole Kidman y el cantante Keith Urban ha llegado a su fin, sorprendiendo a fanáticos y seguidores por igual. Sin embargo, lo que ha llamado la atención en esta separación es un acuerdo prenupcial que contenía una cláusula poco convencional, la cual podría significar una cuantiosa suma de dinero para el músico neozelandés, siempre y cuando cumpla con ciertos requisitos.

Según reportes de *Radar Online*, la pareja firmó antes de su boda en 2006 un contrato que garantizaba a Urban 900,000 dólares por cada año de matrimonio. No obstante, esta cantidad solo sería entregada si el artista lograba mantenerse sobrio y libre de drogas y alcohol. La disposición, conocida popularmente como la “Cocaine Clause”, refleja la importancia que ambos le daban a la salud y estabilidad del cantante en los primeros años de su relación.

## La cláusula y su impacto en la separación

Tras la separación, la cláusula ha adquirido relevancia, especialmente porque Keith Urban ha reconocido públicamente su lucha contra las adicciones. En una entrevista con Oprah Winfrey en 2010, el artista relató que Nicole fue fundamental en su proceso de recuperación. La cantante organizó una intervención que lo llevó a ingresar en rehabilitación, un momento que Urban describe como crucial para su vida y carrera.

“Ella tomó la decisión de organizar la intervención. El amor en esa habitación era tan grande que dije: ‘Pónganme las esposas, vamos’”, confesó en aquella ocasión. Este apoyo fue determinante para que el músico lograra superar sus problemas de adicción y comenzar un largo camino hacia la sobriedad. En recientes apariciones públicas, Urban ha admitido que sus dificultades con las drogas casi destruyen su relación en los primeros meses de matrimonio.

## La crisis y la situación familiar

La relación entre Nicole Kidman y Keith Urban se ha visto afectada en los últimos tiempos, en parte debido a la pérdida de la madre de la actriz en septiembre de 2024. Además, ambos han optado por vivir en distintas ciudades: Keith se trasladó de la mansión en Nashville durante su gira, mientras Nicole continúa en Londres con sus dos hijas, Sunday Rose (17 años) y Faith Margaret (14 años). La separación física y emocional se evidenció en su última aparición pública durante la final del Mundial de Clubes en junio de 2025, donde su lenguaje corporal mostró distancia y nerviosismo, según expertos en análisis de comportamiento.

Las fuentes cercanas aseguran que el deterioro de su relación se intensificó tras la pérdida de la madre de Kidman, lo que ha generado un ambiente de tensión y decisiones difíciles en el proceso de separación. La pareja, que construyó un patrimonio valuado en aproximadamente 282 millones de dólares, aún debe resolver aspectos legales y familiares, incluyendo la posible compensación económica para Urban, siempre que pueda demostrar que ha cumplido con la cláusula de sobriedad.

Por ahora, el acuerdo prenupcial será un elemento clave en los acuerdos de disolución, y su cumplimiento determinará el monto que Urban podría recibir en concepto de indemnización. La historia de esta pareja ejemplifica cómo los acuerdos legales y personales pueden influir en los procesos de separación en el mundo del espectáculo, con repercusiones que trascienden lo mediático.

En definitiva, la separación de Nicole Kidman y Keith Urban no solo marca el fin de una relación de casi dos décadas, sino que también pone en evidencia las complejidades de los acuerdos prenupciales en las parejas públicas, especialmente cuando involucran condiciones tan específicas como la sobriedad.