Explosión en mezquita de Nigeria durante oración deja posibles víctimas y genera investigación

Explosión en una mezquita durante las oraciones vespertinas

Una explosión devastó una mezquita llena de feligreses en el mercado de Gamboru, en la ciudad de Maiduguri, Nigeria. El incidente ocurrió durante las oraciones vespertinas del pasado miércoles, según informaron varias agencias de noticias. Testigos presenciales, como Isa Musa Yusha’u, relataron que vio numerosas víctimas siendo trasladadas para recibir atención médica.

La agencia AFP, citando fuentes locales, indicó que al menos siete personas fallecieron en el ataque. Sin embargo, las autoridades nigerianas aún no han proporcionado detalles oficiales sobre la cantidad exacta de víctimas ni las circunstancias del incidente. La escena muestra signos de gravedad, y las investigaciones iniciales están en marcha.

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Versiones y primeras hipótesis del atentado

Las investigaciones preliminares sugieren que el artefacto explosivo fue colocado dentro de la mezquita y detonó durante la ceremonia religiosa. No obstante, algunos testigos mencionaron la posibilidad de un atentado suicida. Hasta ahora, ninguna organización ha reclamado la autoría del ataque.

Videos grabados tras el incidente, y analizados por la AFP, muestran a una persona cubierta de sangre en el suelo, además de cuerpos cubiertos con sábanas. La situación llevó a una alerta de seguridad emitida por una ONG internacional, que recomendó a su personal en Maiduguri mantenerse alejados del área del mercado.

El portavoz de la policía, Nahum Daso, confirmó la explosión y añadió que ya se encontraba en el lugar un equipo especializado en desactivación de explosivos. Por su parte, Malam Abuna Yusuf, líder de la mezquita, estimó que las víctimas fatales podrían ser al menos ocho.

Contexto de violencia islamista en Nigeria

Maiduguri, capital del estado de Borno, ha sido desde hace años el foco central en la lucha contra los yihadistas de Boko Haram y su facción afiliada al Estado Islámico en África Occidental. Aunque en los últimos años ha sufrido menos ataques importantes, la ciudad sigue siendo un símbolo de décadas de violencia en la región.

El conflicto en Nigeria, en términos generales, ha provocado la pérdida de decenas de miles de vidas y el desplazamiento de millones de personas en el noreste del país. En Maiduguri, todavía se observan vestigios de estos enfrentamientos, como puestos de control y patrullas militares en las calles.

La presencia militar en la capital del estado es constante, y en las zonas rurales la insurgencia continúa avanzando. Expertos advierten sobre un posible aumento de la violencia yihadista antes de que concluya el año, manteniendo en alerta a la región.

El papel persistente de Boko Haram

En julio de 2025, Boko Haram perpetró un ataque en la comunidad de Malam Fatori, que dejó al menos nueve muertos y cuatro heridos, lo que llevó a las autoridades a reforzar las medidas de seguridad. Los ataques terroristas contra civiles se han intensificado, especialmente en Gwoza y en áreas cercanas a Pulka, con al menos 14 muertes en un incidente reciente.

A pesar de los esfuerzos en las operaciones militares, la amenaza de Boko Haram continúa siendo significativa, generando desplazamientos masivos, pérdida de vidas y un creciente nivel de inestabilidad en toda la región.