Francia enfrenta el mayor incendio forestal en décadas: ya arrasó 160 km² y continúa sin control

El devastador avance del incendio en el sur de Francia

El mayor incendio forestal en Francia en varias décadas continúa activo y expandiéndose este jueves, aunque a un ritmo más lento. Hasta ahora, ha destruido más de 160 kilómetros cuadrados en la región del sur, específicamente en el macizo de Corbières, en Aude, y ha cobrado la vida de una persona. Las autoridades locales informaron que, a pesar del despliegue de más de 2.100 bomberos y una flota de aviones cisterna, todavía no se ha logrado controlar por completo.

Factores que alimentan la propagación y daños del incendio

El incendio, que comenzó el martes, se vio favorecido por semanas de clima cálido y seco, condiciones ideales para la expansión de las llamas. Sin embargo, las temperaturas más frías y la reducción de vientos durante las noches han ayudado a disminuir la intensidad del avance. Las autoridades advierten que la lucha contra las llamas continúa y que la situación sigue siendo delicada.

Las llamas han afectado al menos 15 municipios en la zona, destruyendo o dañando al menos 36 viviendas. La evaluación de los daños aún está en curso. Hasta ahora, se reporta una víctima mortal en su hogar, además de 13 personas heridas, entre ellas 11 bomberos. Además, hay tres desaparecidos, según la prefectura de Aude.

Impacto y respuestas ante la emergencia

Los esfuerzos de extinción se ven obstaculizados por la magnitud del incendio, que ha dejado un paisaje devastado con árboles calcinados y cenizas. La causa del siniestro está siendo investigada, aunque algunos indicios sugieren un posible origen accidental o provocado por las altas temperaturas y las condiciones de sequía.

Las imágenes muestran un escenario desolador, con árboles quemados y el humo cubriendo el cielo, incluso desde barcos en la costa de Marsella. La destrucción no solo afecta la flora y fauna, sino también a las comunidades locales, que enfrentan una reconstrucción que podría tomar años. El alcalde de Saint-Laurent-de-la-Cabrerisse, Xavier de Volontat, expresó su tristeza por los daños y la difícil recuperación que enfrentan los habitantes.

Medidas y recomendaciones ante la emergencia

Se ha solicitado a residentes y turistas mantenerse en sus hogares, a menos que se indique lo contrario, para facilitar las labores de extinción y evitar riesgos adicionales. Las personas que lograron huir de las llamas esta noche permanecen en centros de evacuados distribuidos en 17 municipios.

Este incendio, que originó en Ribaute, es considerado el más importante que ha enfrentado Francia desde 1949, según la ministra de Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher. La noche más fresca ayudó a ralentizar la propagación, pero las autoridades advierten que el riesgo persiste y que el cambio climático y la sequía son responsables de esta catástrofe.

La situación continúa siendo de alta alarma, y las autoridades llaman a la población a seguir las instrucciones oficiales para protegerse y colaborar en las tareas de extinción y recuperación.