Hijo de Elena Rojas denuncia intento de silenciarla tras asesinato en Chicama

Bruno Carbonel, hijo de la regidora peruana Elena Rojas (65 años), compartió a través de una historia en la cuenta de Facebook de su madre un mensaje en el que agradece las muestras de cariño recibidas tras el ataque ocurrido en el centro poblado de Sausal, en el distrito de Chicama, provincia de Ascope, La Libertad.

El incidente, ocurrido el 19 de diciembre de 2024, dejó a varias personas heridas de bala, además de la víctima principal, la propia regidora Elena Rojas. En su publicación, Carbonel destacó la importancia de que las investigaciones en curso continúen, recordando que su madre fue víctima de un atentado con explosivos en su vehículo el año anterior.

Reafirmación de la investigación y llamado a esclarecer los hechos

Bruno Carbonel subrayó que toda la familia espera que la investigación iniciada en 2023, tras el atentado con explosivos, tenga continuidad y que se identifiquen a los responsables. “Toda nuestra familia esperamos que continúe la investigación del año pasado, en la cual ella señaló a los posibles responsables”, afirmó.

El hijo de la regidora insistió en que Elena Rojas tenía claro quiénes conformaban la red criminal que trataba de silenciarla. Además, reiteró el pedido de justicia y la necesidad de esclarecer las circunstancias del asesinato de su madre, ocurrido en el contexto del ataque en Sausal.

Declaraciones de Elena Rojas tras el ataque

El 27 de diciembre de 2024, pocos días después del atentado, Elena Rojas hizo una declaración pública en la que descartó que el ataque hubiese sido motivado por extorsión. En su relato, aseguró que el hecho tenía un trasfondo político, relacionado con su labor fiscalizadora en la gestión del alcalde de Chicama, Edilberto Bada.

El contenido del video y las declaraciones de Rojas

En el video, la regidora afirma que nunca le solicitaron dinero y que, tras el atentado, comenzó a recibir mensajes amenazantes por WhatsApp con la finalidad de infundirle miedo. Además, sostiene que el ataque fue planificado.

“Confío en que se determinará al responsable material de estos hechos, pero sobre todo a los responsables intelectuales, las personas que pagaron para atentar contra mi integridad”, expresó.

Rojas agregó que los hechos tienen una relación directa con una política de amedrentamiento y que ha sido víctima de ataques cobardes desde el inicio de su gestión. También cuestionó la eficacia del sistema de seguridad ciudadana en Chicama, señalando deficiencias en la vigilancia, en especial en el funcionamiento de las cámaras y en la respuesta inmediata a emergencias.

Responsabilidad y advertencias

Al final de su pronunciamiento, la regidora responsabilizó directamente a las autoridades y funcionarios involucrados en sus denuncias por cualquier atentado contra ella o su familia. “Hago responsable de cualquier atentado contra mi integridad y la de mi familia a quienes se sientan afectados por las denuncias que he realizado”, afirmó.

Reencuentro con el alcalde y polémica en Chicama

Días después de la difusión del video, Elena Rojas sostuvo un careo con el alcalde de Chicama, Edilberto Bada, en el que discutieron sobre el atentado con explosivos que sufrió su vehículo frente al municipio. El alcalde cuestionó el uso del término “corruptos” en las denuncias de la regidora y sugirió que el ataque podría haber sido dirigido contra su pareja, vinculándolo a actividades irregulares.

Por su parte, Rojas defendió sus denuncias, basadas en informes de la Contraloría que, según afirmó, ya han establecido responsabilidades administrativas y penales en algunos casos. Además, aseguró que no tiene antecedentes judiciales, policiales ni laborales, y rechazó cualquier insinuación que pueda poner en duda su trayectoria personal y profesional.