Imitadora de Michael Jackson impresiona al jurado de ‘Yo Soy’

Imitadora de Michael Jackson deslumbra en «Yo Soy 2025» con una interpretación que emociona a todos

La noche en el set de ‘Yo Soy’ se iluminó con un momento mágico cuando Gabriela, una joven imitadora de Arequipa, apareció vestida como Michael Jackson. Desde su ingreso al escenario, la energía cambió por completo.

Con la seguridad de quien ha soñado con este instante desde la infancia, Gabriela saludó al jurado y se presentó. Su pasión por la música, inspirada por su padre y por el ícono del pop, la llevó a participar en esta audición donde cada detalle—el vestuario, la voz y los movimientos— recreó la esencia del “Rey del Pop”.

El público estalló en aplausos mientras Ricardo Morán y los demás jueces quedaban asombrados por la entrega y el talento de la concursante.

Gabriela, con una voz serena pero segura, explicó que su vínculo con la música comenzó en su niñez. Recordó que, cuando empezó a conocer el mundo artístico, Michael Jackson ya había fallecido. Desde entonces, su admiración se convirtió en una fuente de inspiración constante.

“Fue mi papá quien me motivó a escuchar su música y a querer interpretarlo. He esperado este momento toda mi vida”, confesó la joven.

La concursante también compartió que, aunque ha realizado pequeñas presentaciones en concursos locales y eventos comunitarios, nunca había enfrentado una prueba televisiva de esta magnitud. Su preparación ha ido más allá del canto y la danza, buscando entender en profundidad la figura que marcó generaciones enteras.

Ricardo Morán, claramente impresionado por su apariencia y actitud, le preguntó acerca de su desempeño en canto y baile. Gabriela respondió sin vacilar: “Soy muy buena bailando y canto desde pequeña. Michael presenta un reto inmenso, su registro vocal es impecable, pero estoy lista para enfrentarlo”.

Su seguridad y respeto por el legado del artista se reflejaron en su voz y en su actitud. Para Gabriela, la imitación no es solo una copia, sino una forma de honrar y conectar con un ícono que le enseñó disciplina, entrega y sensibilidad artística.

El ingreso de Gabriela al escenario fue un momento de gran expectativa. Ricardo Morán, con su característico ojo crítico, destacó de inmediato la dedicación en el vestuario y el maquillaje. “¡Qué buena caracterización!”, exclamó, mientras Jely Reátegui la recibía con un cálido “¡Bienvenida! ¡Hola!”.

Desde ese instante, el ambiente se cargó de una energía especial. El jurado observaba atentamente cada movimiento y cada palabra. Morán no dudó en preguntar si era la misma participante que días antes sorprendió en una plaza de Arequipa con su imitación. Gabriela sonrió y negó: “No, hay otro Michael Jackson”.

Su naturalidad y entusiasmo despertaron simpatía en todos los presentes. Más allá de su parecido físico, transmitía una emoción auténtica. Cuando llegó el momento de su presentación formal, respiró profundo y afirmó con determinación: “Yo soy Michael Jackson”. Esa frase marcó el comienzo de una interpretación que dejó sin palabras a todos los espectadores.

Con movimientos precisos, dominio corporal y una actitud escénica impecable, Gabriela logró capturar la esencia del artista original. Cada paso y expresión evocaba con fidelidad la magia y el talento del ídolo, dejando una impresión imborrable en el jurado y el público.