Interpol busca a narco trujillano de 23 años por presunto vínculo en asesinato de tres jóvenes en Argentina

## Identificación y contexto de ‘Pequeño J’

Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como «Pequeño J», ha sido señalado como el cerebro del triple femicidio ocurrido en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires. Este joven de 20 años, nacido en Trujillo, La Libertad, en Perú, ya contaba con antecedentes penales y ahora está en la mira de las autoridades internacionales. La notoriedad de su nacionalidad peruana ha contribuido a que el caso tenga repercusión en el extranjero.

Se le atribuye ser el autor intelectual del asesinato de Brenda, Morena y Lara, las víctimas cuyo crimen generó gran conmoción social. Actualmente, su búsqueda se mantiene activa a nivel global, tras la emisión de una alerta roja por parte de Interpol. El hecho, vinculado presuntamente a una banda narco, ha puesto en evidencia la dimensión transnacional del crimen y la creciente preocupación por la seguridad en la región.

## Investigación y avances policiales

La figura de Valverde Victoriano emergió como un elemento clave en la investigación después de que la Policía Bonaerense lograra identificarlo la noche del viernes. La policía recopiló diversas pistas y testimonios en el expediente judicial que apuntaban a su implicación. La confirmación de su prontuario en Perú reforzó la hipótesis de su liderazgo en actividades delictivas relacionadas con el narcotráfico.

El alias «Pequeño J» fue consolidado en el expediente mediante declaraciones extraoficiales de los primeros detenidos y de un testigo clave que aportó detalles precisos sobre su identidad y movimientos. La investigación se apoyó en el análisis de comunicaciones telefónicas y en la cooperación internacional, lo que permitió avanzar en la ubicación del sospechoso.

## Colaboración internacional y detenciones

Los fiscales Adrián Arribas y Lorena Pecorelli solicitaron la triangulación de antenas de telefonía celular, lo que permitió determinar que Valverde Victoriano se reunió antes y después de la madrugada del 20 de septiembre con Matías Ozorio, también buscado por Interpol y presunto cómplice. La presencia de Ozorio en el lugar del crimen resulta fundamental para entender la planificación y ejecución de los asesinatos.

El hallazgo del teléfono de «Pequeño J» facilitó un allanamiento en Isidro Casanova, donde la policía secuestró documentación, un arma de fuego y prendas con manchas de sangre, que serán sometidas a análisis para determinar su relación con las víctimas. La dimensión internacional del caso quedó evidenciada con la detención de Lázaro Víctor Sotacuro en un hostal de Villazón, Bolivia, a solo 600 metros de la frontera argentina. La operación, coordinada entre fuerzas de seguridad de ambos países, llevó a la difusión de la imagen de Valverde Victoriano y al refuerzo del pedido de captura internacional.

## Búsqueda y posibles refugios

Tras la detención en Bolivia, las autoridades argentinas intensificaron la búsqueda del prófugo, realizando allanamientos en la Villa Zavaleta. Se sospecha que Valverde Victoriano cuenta con familiares que podrían brindarle refugio, motivo por el cual también se llevaron a cabo operativos en esa zona. La colaboración internacional continúa siendo fundamental para dar con su paradero y esclarecer completamente el caso.

## El crimen y su impacto social

El triple femicidio, ocurrido tras la desaparición de las jóvenes Brenda, Morena y Lara en la madrugada del 20 de septiembre, ha generado un fuerte impacto social y mediático en Argentina. Las víctimas, cuyas edades oscilaban entre los 15 años, fueron asesinadas en un contexto que se vincula a actividades delictivas y a una posible venganza relacionada con el narcotráfico. La investigación continúa en marcha, con la esperanza de capturar a los responsables y esclarecer todos los detalles del crimen.