Jair Bolsonaro abandona prisión domiciliaria para someterse a cirugía de piel bajo fuerte seguridad y en medio de apoyo de seguidores

Jair Bolsonaro inicia una salida médica bajo estrictas medidas de seguridad

El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, abandonó temporalmente este domingo su residencia en Brasilia, donde cumple una orden de prisión domiciliaria, para someterse a un procedimiento médico ambulatorio. Esta fue su primera salida oficial desde que fue condenado a 27 años y tres meses de prisión por su papel en un intento de golpe de Estado.

El líder de la ultraderecha salió escoltado por una caravana de vehículos policiales y llegó a un hospital privado en la capital brasileña alrededor de las 8:00 horas locales (11:00 GMT). La salida se realizó bajo un fuerte esquema de seguridad, debido a la gravedad del caso y los riesgos asociados.

Contexto y antecedentes de la condena

La condena de Bolsonaro fue dictada hace tres días por el Tribunal Supremo, que lo acusó de liderar un complot para alterar el proceso democrático y mantenerse en el poder tras perder las elecciones de 2022 ante Luiz Inácio Lula da Silva. La decisión fue un hecho sin precedentes: por primera vez un expresidente brasileño recibe una condena por intento de golpe de Estado.

El magistrado Alexandre de Moraes autorizó la salida del exmandatario, quien deberá permanecer bajo vigilancia policial permanente durante su desplazamiento y presentar un informe médico en un plazo máximo de 48 horas tras el procedimiento.

Detalles del procedimiento médico y medidas de seguridad

Según la solicitud presentada por sus abogados, Bolsonaro debe acudir a un hospital particular para retirar dos lesiones cutáneas. Los médicos realizarán una biopsia para analizar un lunar benigno en el torso y una piel que presenta una neoplasia de comportamiento incierto o desconocido, que requiere evaluación adicional.

El procedimiento, considerado sencillo y ambulatorio, consiste en la extracción de un melanocítico y una lesión de la piel. Esta es la segunda salida médica del expresidente desde que se encuentra en prisión domiciliaria; la primera fue en agosto, para realizarse exámenes relacionados con síntomas de reflujo e hipo, secuelas de una puñalada recibida en 2018 durante su campaña electoral.

Reacciones y contexto político

El jueves pasado, la Sala Primera del Supremo Tribunal condenó a Bolsonaro con una sentencia que lo inhabilita hasta 2030 por su participación en actividades de desinformación electoral. Sin embargo, el exmandatario confía en revertir esa decisión y presentar su candidatura en los comicios de 2026.

El caso también involucra a otros siete acusados, entre ellos exministros y altos mandos militares, que fueron declarados culpables en la misma audiencia. La condena marca un hito en la historia política de Brasil, evidenciando la gravedad de las acusaciones y las tensiones en torno a la estabilidad democrática del país.

Por ahora, los aliados más cercanos de Bolsonaro prefieren mantener un perfil bajo, evitando declaraciones públicas que puedan complicar aún más su situación legal.

Imágenes y presencia en el lugar

Seguidores del exmandatario se congregaron en las cercanías del hospital para expresarle su apoyo, en medio de un ambiente de alta vigilancia. La llegada de Bolsonaro fue registrada por fotógrafos y medios de comunicación, evidenciando el impacto político y social que genera su situación.

El operativo de vigilancia fue reforzado por la Policía Federal, que garantizó la seguridad durante toda la jornada, en medio de una tensión política que sigue en aumento en Brasil.