Un nuevo sismo se ha registrado en la capital peruana, convirtiéndose en el tercer temblor en menos de 24 horas. El movimiento telúrico ocurrió a las 7:19 p.m. en la provincia de Huarochirí, con una magnitud de 3.7 y una profundidad de 98 kilómetros.

Según el Instituto Geofísico del Perú (IGP), el epicentro se ubicó a 21 km al norte de Ricardo Palma, y la intensidad alcanzó niveles II–III en la escala de Mercalli, por lo que fue percibido de manera leve por algunos habitantes de la zona.

El primer temblor del día ocurrió a las 11:41 a.m., con una magnitud de 4.6. El epicentro se localizó a 56 km al suroeste de Bellavista, en el Callao, a una profundidad de 44 km. La percepción en la población fue de intensidad III a IV, considerada leve a moderada, sin reportes de daños ni heridos.

Horas después, a las 5:06 p.m., se registró un sismo de magnitud 4.9, con epicentro a 22 km al oeste de Huaral, en la misma región de Lima. Este movimiento ocurrió a una profundidad de 89 km y tuvo una intensidad de III–IV, siendo claramente sentido por la población aunque sin causar daños estructurales.

La vulnerabilidad sísmica de Lima

Debido a su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico, Lima se encuentra en una de las zonas con mayor exposición sísmica en Sudamérica. La interacción entre las placas de Nazca y Sudamericana genera una actividad tectónica constante en la región, manteniendo a la ciudad en riesgo permanente de experimentar un terremoto de gran magnitud.

Los expertos advierten que la ciudad atraviesa un período de casi 300 años de “silencio sísmico”, lo que aumenta la probabilidad de un evento mayor en el futuro cercano. Además, muchas zonas de Lima están asentadas sobre suelos blandos, rellenos o áreas no consolidadas, que amplifican las ondas sísmicas durante un sismo.

Esta combinación de factores convierte a Lima en un territorio especialmente vulnerable ante movimientos telúricos fuertes, especialmente en distritos con alta densidad poblacional y edificaciones construidas sin criterios técnicos adecuados.

Evaluación de riesgos y recomendaciones

El reciente sismo detectado por el Instituto Geofísico del Perú reavivó las preocupaciones respecto a la capacidad de Lima para afrontar un sismo de mayor magnitud. Los estudios indican que los distritos situados sobre suelos blandos o rellenos presentan un riesgo elevado, debido a la amplificación de las ondas sísmicas y a la presencia de construcciones informales que no cumplen con las normativas de seguridad.

Es fundamental que las autoridades y la población refuercen las medidas preventivas, actualicen los planes de emergencia y fortalezcan las construcciones en las zonas más vulnerables para reducir los posibles daños en futuros eventos.