¿Qué pasó?
En alerta se encuentra Israel por un inminente ataque de represalia de Irán y sus aliados, en respuesta al asesinato del líder de movimiento islamista palestino Hamás, Ismail Haniyeh. La situación podría desembocar en una nueva escalada militar en Medio Oriente.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró el domingo que su país está dispuesto a enfrentarse a «Irán y sus secuaces en todos los frentes».
«Cualquiera que mate a nuestros ciudadanos o perjudique a nuestro país (…) pagará un precio muy alto«, advirtió.
Este lunes, el ejército israelí anunció la llegada a su territorio del jefe del Mando Central de Estados Unidos para Oriente Medio (Centcom), el general Erik Kurilla, para evaluar la situación de seguridad. Por su parte, un emisario ruso, el exministro de Defensa Serguéi Shoigú, llegó a Teherán.
«Irán tiene legalmente el derecho a castigar»
Irán, el movimiento islamista palestino Hamás y el Hezbolá libanés atribuyeron a Israel la muerte el miércoles del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, asesinado en su residencia de Teherán. El día anterior, Israel había reivindicado un ataque que mató al jefe militar de Hezbolá, Fuad Shukr, cerca de Beirut.
Israel no hizo comentarios sobre la muerte de Haniyeh, pero prometió destruir a Hamás tras el ataque sin precedentes efectuado por este movimiento en su territorio el 7 de octubre, que desencadenó la devastadora guerra de Gaza.
Desde entonces, Hezbolá y los rebeldes hutíes de Yemen, que junto con Hamás y grupos armados iraquíes forman lo que Irán denomina el «eje de la resistencia», abrieron nuevos frentes contra Israel.
Pero los asesinatos de la semana pasada llevaron al líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, a decir que Israel había cruzado las «líneas rojas». El líder supremo de Irán, Alí Jamenei, amenazó con un «severo castigo». «Irán tiene legalmente el derecho a castigar» a Israel, insistieron este lunes las autoridades iraníes.
Estados Unidos trata de «calmar la situación diplomáticamente»
Ante el riesgo de una conflagración regional, el presidente estadounidense, Joe Biden, tiene previsto convocar este lunes al Consejo de Seguridad Nacional para «examinar los últimos acontecimientos en Oriente Medio», según la Casa Blanca. Estados Unidos, principal aliado de Israel, reforzó su dispositivo militar en la región y aseguró que también trata de «calmar la situación diplomáticamente».
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, instó este lunes en llamadas telefónicas a todas las partes a tomar «medidas en los próximos días para abstenerse de toda escalada y calmar las tensiones«, según el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
El presidente francés Emmanuel Macron, su homólogo emiratí Mohamed bin Zayed al Nahayane y el príncipe heredero saudita Mohamed bin Salmán pidieron a «todos los actores» de Oriente Medio «responsabilidad y moderación».
Y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, instó «a todas las partes, así como a los Estados que tengan influencia, a que actúen con urgencia» para evitar una propagación del conflicto.
Irán y Hezbolá podrían lanzar un ataque contra Israel en 24 o 48 horas, dice EEUU
Según el medio estadounidense Axios, Blinken dijo a sus homólogos del G7 que Irán y Hezbolá podrían lanzar un ataque contra Israel en 24 o 48 horas, es decir, a partir de este lunes, según tres fuentes conocedoras de las conversaciones.
Blinken también habló por teléfono con el primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, ante la posibilidad de ataques de grupos armados iraquíes favorables a Irán.
El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, aseguró que su país debe prepararse «para todas las eventualidades, incluida una transición rápida al ataque».