¿Qué pasó?
Las autoridades brasileñas denunciaron, esta semana, que 163 trabajadores de una planta de BYD estaban siendo víctimas de esclavitud moderna en Brasil. Lo anterior fue desmentido por la compañía, que afirmó que por esta acusación ahora el personal se siente «insultado«.
La denuncia contra la empresa BYD
La filial brasileña del fabricante automotriz chino quedó en evidencia una vez que el Ministerio Público del Trabajo (MPT) de Bahía realizara diversos controles desde el mes de noviembre, en los que se logró identificar a «163 obreros que se encontraban en condiciones análogas a la esclavitud«.
Ante esto, un vocero del MPT precisó el martes recién pasado que todos los operarios rescatados eran de nacionalidad china.
De acuerdo a lo anterior, el organismo denunció en un comunicado «una situación alarmante de precariedad», con «condiciones de trabajo degradantes» para los obreros.
En el escrito se detalló que en uno de los alojamientos para los trabajadores, estos «dormían en camas sin colchones y no tenían armarios para guardar sus pertenencias personales, que estaban mezcladas con los alimentos».
Incluso, se reveló que una vez en la obra «los trabajadores estaban expuestos a una intensa radiación solar» y presentaban «signos claros de problemas en la piel».
¿Qué respondió la empresa?
Tras dar conocimiento de estos hechos, una empresa subcontratista de BYD negó, la jornada del jueves, la existencia de «condiciones análogas a la esclavitud» en las obras de construcción.
«La inexplicable etiqueta de ‘esclavizados’ ha hecho que nuestro personal se sienta gravemente insultado«, escribió la empresa en las redes sociales.
Al mismo tiempo, la compañía compartió imágenes de una carta en la que niega la existencia de condiciones de trabajo degradantes.