Rusia sufrió una ola de intentos de ataques incendiarios contra bancos, centros comerciales, oficinas de correos y edificios gubernamentales en los últimos tres días, informan los medios de comunicación.
La agencia de prensa TASS y el portal independiente Fontanka señalaron que se registraron cerca de 20 casos de individuos que trataron de hacer estallar pequeños artefactos explosivos o de lanzar fuegos artificiales contra edificios.
Los hechos tuvieron principalmente lugar en San Petersburgo, Moscú y los suburbios circundantes, precisaron.
La agencia TASS citó a una fuente anónima quien afirmó que las personas implicadas fueron reclutadas por estafadores en línea a cambio de dinero.
Las imágenes de las cámaras de vigilancia de algunos lugares, compartidas en redes sociales, parecen mostrar a individuos que usan sus teléfonos móviles para grabar los incendios que intentan provocar.
Otras imágenes muestran las secuelas de un ataque, con un cajero automático destruido y las ventanas cercanas reventadas. Un video muestra también un coche de policía incendiado.
Los cajeros automáticos de los bancos estatales, los centros comerciales, las oficinas de correos, las oficinas de alistamiento militar, los vehículos policiales y otros edificios administrativos han sido atacados.
Uno de los videos muestra a una mujer provocando una explosión en un cajero automático de San Petersburgo. Según lo informado por la prensa local, se trataría de una mujer de unos 68 años, que fue detenida bajo sospecha de haber cometido el delito y se abrió contra ella una causa penal en virtud del artículo 205 del Código Penal de la Federación de Rusia (acto terrorista).
Otras personas fueron detenidas en las últimas horas por los otros ataques.
Actualmente se está llevando a cabo una investigación sobre las circunstancias y la magnitud de las actividades explosivas, así como la identificación de todas las personas implicadas en la organización de las explosiones.
El centro comercial Fort, en el noreste de Moscú, tuvo que ser evacuado debido a una explosión en el centro de servicios gubernamentales que se encuentra allí. El canal de Telegram Mash informa que una mujer que tropezó en medio de la evacuación fue trasladada al hospital.
En Korolyov las autoridades evacuaron otro centro de servicios integrados y un centro comercial, así como una oficina de correos en Khimki, en la región de Moscú.
El prestamista estatal Sberbank reportó un aumento del 30 por ciento en los intentos de ataques incendiarios durante la última semana, según la agencia estatal de noticias RIA Novosti citando al servicio de prensa del banco.
La mayoría de los detenidos fueron pensionistas, indicó la agencia TASS. Sberbank afirmó que habían sido reclutados por personas en Ucrania.
Los servicios de seguridad rusos (FSB) advirtieron a la población de que estafadores ucranianos, haciéndose pasar por guardias de seguridad, llamaban a ancianos para pedirles cometer incendios a cambio de dinero o de recuperar el acceso a cuentas bloqueadas.
No hubo ninguna reacción de Kiev a la ola de intentos de ataques ni a las acusaciones de que estaban siendo orquestados desde territorio ucraniano.
Desde el inicio de la ofensiva rusa en Ucrania en febrero de 2022, varias oficinas de reclutamiento del ejército ruso han sido objeto de ataques incendiarios con cócteles molotov.
Los edificios de reclutamiento se vieron más atacados después de que el presidente Vladimir Putin anunciara una impopular campaña de reclutamiento en septiembre de 2022 en la que más de 300.000 rusos fueron reclutados a la fuerza para luchar en el conflicto.
En medio de esta ola de ataques incendiarios, Ucrania llevó la guerra al corazón de Rusia este sábado por la mañana con ataques con drones que, según las autoridades locales, dañaron edificios residenciales en la ciudad de Kazán, en la región de Tartaristán, a más de 1.000 kilómetros de la línea del frente.
El servicio de prensa del gobernador de Tartaristán, Rustam Minnikhanov, informó que ocho drones atacaron la ciudad. Seis de ellos impactaron en edificios residenciales, uno en una instalación industrial y otro fue derribado sobre un río, según el comunicado.
Las autoridades locales indicaron que no hubo víctimas. Los vuelos se suspendieron en el aeropuerto de Kazán y se cancelaron todas las reuniones multitudinarias del sábado y el domingo.
(Con información de AFP)
Fuente: Inboae.com