Seguramente, en muchos hogares consideran al paracetamol como un medicamento que sirve para todo: dolor de cabeza, fiebre o inflamación, por mencionar algunos malestares. Sin embargo, su consumo habitual puede ocasionar graves problemas para la salud.
Así lo evidencia un estudio científico de la Universidad de Nottingham. Centrándose en los adultos mayores, el documento señala que la ingesta indebida de este fármaco puede derivar en hemorragias internas y enfermedades renales crónicas, además de complicaciones digestivas y cardiacas.
¿Por qué se centró en mayores de 65 años? Porque son los principales pacientes a los que se les receta paracetamol para, supuestamente, aminorar los dolores provocados por la artritis y la osteoporosis, dos enfermedades crónicas que suele padecer la población de tercera edad.
A mayor consumo de paracetamol, más empeora la salud
El estudio se realizó durante 20 años, en los que se hizo seguimiento a más de medio millón de adultos mayores. Una de las principales conclusiones fue que a los ancianos que se les recetó dos veces paracetamol en seis meses están en alto riesgo de tener complicaciones, tales como:
- Úlceras de estómago.
- Insuficiencia cardica.
- Hipertensión.
- Enfermedades crónicas renales.
En ese sentido, la evidencia arrojó que mientras mayor era el consumo indebido del medicamento, más grave podían ser los problemas en la salud.
«El uso de paracetamol como analgésico de primera opción para enfermedades a largo plazo, como la osteoartritis, en personas mayores debe considerarse cuidadosamente«, sugirió Weiya Zhang, autor del estudio, además de epidemiólogo del Instituto Nacional de Investigación Biomédica de Salud y Asistencia de la Universidad de Nottingham.
El análisis de Zhang no es el primero que advierte sobre los riesgos del fármaco. En realidad, son varios los que lo han hecho: por ejemplo, hay uno que sostiene que el tipo de daño a las células del órgano causado por el paracetamol es similar al inducido por el alcohol y la hepatitis; otros declaran que, en dosis altas, puede causar acidez, dolor, náuseas y vómitos; y unos indican que su consumo a largo plazo incentiva el aumento de la presión arterial.
Tantas son las advertencias en torno a él, que el Instituto Nacional para la Excelencia en la Salud y la Atención de Reino Unido modificó las pautas del tratamiento de la osteoartritis, de modo que los médicos sugieran programas de ejercicios en vez de recetar paracetamol.