
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este domingo que su gobierno está a punto de levantar la suspensión del intercambio de inteligencia con Ucrania, en un intento por incentivar negociaciones de paz con Rusia.
“Estamos a punto de hacerlo”, dijo Trump a los periodistas a bordo del Air Force One.
“Queremos hacer todo lo posible para que Ucrania se tome en serio la idea de hacer algo”, añadió.
La declaración de Trump llega después de que la CIA anunciara el 5 de marzo la interrupción del flujo de información hacia Kiev, en medio de tensiones entre la Casa Blanca y el presidente ucraniano Volodimir Zelensky. El cese de inteligencia siguió a la congelación inmediata de la ayuda militar estadounidense a Ucrania.
Desde la suspensión, Ucrania ha enfrentado dificultades para defenderse de los ataques rusos. Según The New York Times, la falta de información ha debilitado la capacidad de Kiev para interceptar drones y misiles rusos. En los días posteriores a la medida, bombardeos rusos en las ciudades de Kryvyi Rih y Dopropillia dejaron 15 muertos y más de 80 heridos.
Zelensky ha insistido en que cualquier acuerdo de paz debe incluir garantías de seguridad respaldadas por Washington, algo que EEUU no ha ofrecido hasta el momento.
Trump se mostró optimista sobre las conversaciones programadas en Arabia Saudita el 11 de marzo, donde delegaciones de EEUU y Ucrania discutirán un posible marco de paz.
“Vamos a lograr muchos avances esta semana”, dijo el mandatario republicano, al tiempo que mencionó que las reuniones en Yeda incluirán la participación de representantes rusos. Según fuentes oficiales citadas por Reuters, Washington busca evaluar la disposición de Ucrania para hacer concesiones en la negociación con Moscú.
Otro tema clave en la agenda es un acuerdo sobre minerales estratégicos entre EEUU y Ucrania. Trump aseguró que Kiev firmará el pacto, pero enfatizó que quiere que Ucrania muestre mayor interés en la paz.
“Firmarán el acuerdo de minerales, pero quiero que también quieran la paz”, afirmó.
Trump también comentó que su gobierno evalúa posibles sanciones o aranceles contra Rusia, aunque no especificó qué medidas se implementarían.
“Estamos viendo muchas cosas”, dijo, agregando que su prioridad en los próximos días serán reuniones clave en Arabia Saudita.
Cuando se le preguntó sobre el impacto económico de sus políticas comerciales, el presidente defendió los aranceles y afirmó que convertirán a EEUU en un país “más rico que nunca”.
Las tensiones entre Washington y Kiev han aumentado en las últimas semanas debido a la presión de EEUU para que Ucrania acepte un alto el fuego. Mientras tanto, las fuerzas rusas han intensificado sus ataques en el este del país, lo que mantiene el conflicto en una fase de alta violencia.
Trump fue entrevistado este domingo en la cadena Fox News, donde dijo prever un “periodo de transición” económica marcado por los aranceles que EEUU ha impuesto o pretende imponer a los bienes de otros países.
Entrevistado por la presentadora Maria Bartiromo, y preguntado por algunos datos que apuntan a una recesión este año, Trump respondió: “Odio predecir cosas como esa. Hay un periodo de transición, porque lo que estamos haciendo es muy grande, estamos trayendo la riqueza a EEUU de nuevo”.
En el Air Force One, de regreso de su fin de semana en Mar-a-Lago, Trump aclaró que es normal dudar sobre la posibilidad de que EEUU entre en recesión.
“¿Quién sabe? Lo único que les puedo decir es que vamos a recaudar cientos de miles de millones en aranceles y nos vamos a volver tan ricos que no vamos a saber cómo gastar todo ese dinero”.
En paralelo, el secretario de Comercio, Howard Lutnick, en una entrevista en NBC, aseguró que “no habrá una recesión en EEUU” y argumentó que “los aranceles globales van a bajar porque el presidente Trump ha dicho: ¿Nos quieren imponer un 100 %? Nosotros les impondremos un 100 %”.
Trump tuvo que abordar los vaivenes en los aranceles de su Gobierno a México y Canadá, que preocupan a los mercados, y adelantó que el 2 de abril entrarán en vigor los “aranceles recíprocos”, insistiendo en que tienen sentido porque otros países están “estafando” al suyo, mientras que la semana pasada reconoció que su política económica puede requerir “pequeños ajustes” para los estadounidenses.
Respecto a los aranceles recíprocos a los bienes de aquellos países que graven las importaciones estadounidenses, Lutnick explicó que “algunos productos que se hacen en el extranjero pueden ser más caros, pero los estadounidenses se abaratarán, y esa es la meta”.
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump, ha amenazado con aranceles a México y Canadá, así como a China, entre otros países, y ha aplicado las tasas para, en algunos casos, revertirlas temporalmente, como en el caso de los bienes incluidos en el acuerdo T-MEC con sus vecinos.
(Con información de Reuters y EFE)
Fuente: Inboae.com