Tragedia en Tailandia: Hombre iba camino a paradisíaco destino cuando cayó de un tren y falleció

Lo que suponía ser un viaje romántico terminó de manera trágica, después de que un hombre falleciera cayendo debajo de un tren mientras se dirigía juntos a su pareja a la isla de Koh Tao, denominada como «Isla de la Muerte» en Tailandia.

La víctima fue el canadiense Ryan Joseph Ralph de 24 años, quien viajaba con su novia Shona Morgan, una joven norirlandesa de 22 años.

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El trágico suceso ocurrió el pasado 20 de marzo, horas después de que la pareja abordase el ferrocarril para dirigirse a su destino.

La isla a la que viajaban es conocida por diferentes casos de asesinatos, que tienen generalmente como víctimas a turistas que visitan la zona.

Cronología del accidente

Según indicó The Sun, Ryan llevaba viajando algunos días por Tailandia, antes de que Shona se uniera para poder celebrar su cumpleaños juntos.

El incidente ocurrió después de que el hombre se retirara de la habitación en el tren para poder comprar cigarros, mientras su pareja dormía.

El joven habría caído del tren mientras caminaba por los vagones, los cuales generalmente no cuentan con barreras o puertas de seguridad.

Las autoridades suponen que el hombre se golpeó con la plataforma al caer, para que después su cuerpo fuera arrastrado por el tren en movimiento.

«El canadiense no murió instantáneamente. Logró arrastrarse bajo la plataforma, pero murió más tarde por pérdida de sangre» señaló la policía, de acuerdo al medio.

«Pensé que estaba durmiendo»

Al despertarse, Shona intentó ponerse en contacto con Ryan, pero no tuvo éxito. Preocupada, descendió del tren y notificó a una comisaría su desaparición. 

Después no lograr localizar al hombre por horas esa noche, las autoridades del caso decidieron dejar la investigación para la mañana siguiente.

Fue durante esa jornada que se informó que se había encontrado el cuerpo de un extranjero en las vías de la estación de trenes de Chet Samian.

Ryan fue encontrado por un trabajador de lugar llamado Makala, quien generalmente duerme debajo del andén en sus horas de descanso, según consigno el medio.

«La persona estaba acostada, así que al principio pensé que estaba durmiendo. Cuando miré más de cerca, no respiraba. Tenía miedo, así que corrí a informar a mi supervisor» señaló Makala.

Después de que su cuerpo fuera retirado de las vías y llevado al instituto forense, se le informó la situación a la embajada canadiense para que se comunicaran con la familia del afectado.

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