¡Pakistán y Afganistán firman alto el fuego de 48 horas tras días de violencia y acusaciones de promover grupos paramilitares

Pakistán y Afganistán acuerdan un alto el fuego temporal tras intensos enfrentamientos

Las tensiones entre Pakistán y Afganistán alcanzaron un punto crítico en los últimos días. Ambos países han decidido implementar un alto el fuego de 48 horas, después de que decenas de soldados y civiles resultaran fallecidos en los enfrentamientos más graves en su frontera en años recientes. La decisión llegó tras días de escalada de violencia que amenazaban la estabilidad regional.

Contexto de la escalada y antecedentes

Desde la semana pasada, los enfrentamientos se han intensificado en la frontera, con ataques registrados tanto en Kabul como en diferentes puntos de la frontera con Pakistán. Pakistán acusa a los talibanes de fomentar un movimiento paramilitar en su territorio, lo que ha agravado aún más la situación. Por su parte, Kabul atribuye parte de la violencia a las acciones de Pakistán, que ha llevado a ataques de precisión en territorio afgano, según fuentes oficiales paquistaníes.

Detalles del acuerdo y declaraciones oficiales

La cancillería de Pakistán informó que, «a petición de los talibanes», ambas naciones decidieron aplicar un alto el fuego temporal durante las próximas 48 horas. En línea con esto, el gobierno talibán ordenó a sus fuerzas militares respetar la tregua. Zabihullah Mujahid, portavoz de Afganistán, afirmó que «el Emirato Islámico también ordena a todas sus fuerzas mantener el cese de hostilidades».

Antes del anuncio, tanto Kabul como Islamabad se acusaban mutuamente de realizar nuevos ataques en la frontera. Sin embargo, Pakistán también admitió haber llevado a cabo «ataques de precisión» en territorio afgano, lo que refleja la complejidad y la escalada de la crisis.

Impacto en la población y situación en Kabul

Los enfrentamientos recientes dejaron un saldo de heridos y víctimas mortales en Kabul. La ONG italiana Emergency, que administra un hospital en la capital afgana, reportó haber atendido a 35 heridos y al menos cinco muertos. Las autoridades talibanas aún no han divulgado cifras oficiales sobre las víctimas en estos ataques.

Además, en la noche, dos explosiones sacudieron el centro de Kabul, provocando un fuerte despliegue de las fuerzas de seguridad y la llegada de ambulancias. La violencia se intensificó tras una serie de explosiones en Afganistán, atribuidas por Kabul a Pakistán, lo que llevó a una respuesta militar en varias zonas fronterizas.

Acusaciones y tensiones persistentes

Pakistán mantiene su acusación de que Afganistán alberga a milicias respaldadas por el movimiento paramilitar pakistaní Taliban Tehreek-e-Taliban (TTP), lo cual Kabul rechaza categoricamente. En el último incidente, el ejército pakistaní acusó a los talibanes afganos de atacar dos importantes puestos fronterizos en las regiones suroeste y noroeste del país.

La situación en la frontera continúa siendo delicada, con ambos países en un estado de alerta máxima. La comunidad internacional ha pedido moderación y diálogo para evitar una escalada que podría afectar toda la región.