Paolo Guerrero abandona lesionado en duelo entre Alianza Lima y U. Católica durante los octavos de la Copa Sudamericana 2025

La noche del miércoles 13 de agosto en el estadio Alejandro Villanueva, conocido popularmente como Matute, quedó marcada por un incidente inesperado que preocupó a los seguidores de Alianza Lima y especialmente a su capitán, Paolo Guerrero. En los primeros 30 minutos del partido contra Universidad Católica de Ecuador, el experimentado delantero sufrió una lesión que lo obligó a abandonar el campo entre lágrimas, visiblemente afectado.

Guerrero, quien regresó a la alineación titular tras recuperarse de un esguince en el tobillo derecho, fue una pieza clave en este encuentro decisivo por los octavos de final de la Copa Sudamericana 2025. Sin embargo, su presencia en el terreno de juego fue breve. Después de una jugada en la que intentó avanzar en el área rival tras recibir un pase de Sergio Peña, sintió un dolor intenso en la pierna que le impidió continuar. A pesar de sus esfuerzos por mantenerse, la molestia fue insostenible y tuvo que abandonar el campo en medio de lágrimas, rodeado por sus compañeros y el respaldo del cuerpo técnico.

El sustituto inmediato fue Hernán Barcos, quien entró en el minuto final del primer tiempo para reforzar la ofensiva del equipo. La lesión de Guerrero genera incertidumbre sobre su participación en el próximo encuentro de vuelta, programado para el miércoles 20 de agosto en Quito, donde Alianza Lima buscará revertir el marcador en un escenario difícil.

El delantero de 41 años había estado fuera de acción en los cuatro partidos anteriores del club debido a un esguince en el tobillo sufrido en los play-offs contra Gremio. Pese a ello, logró recuperarse rápidamente y volver a las canchas en este crucial compromiso. Sin embargo, su estado físico aún genera dudas y preocupa a la hinchada, que espera que el diagnóstico médico no sea grave para que pueda estar presente en la revancha.

El duelo de vuelta se disputará en el Estadio Olímpico Atahualpa en Quito, escenario donde los ecuatorianos ejercerán de locales. La serie se presenta muy pareja tras el empate en la ida en Matute y promete ser un encuentro lleno de emociones, con ambos equipos buscando avanzar a los cuartos de final en una competencia que mantiene en vilo a todos los seguidores del fútbol sudamericano.